" Oh Dios,  que te alaben los pueblos, que todos los pueblos te alaben "...Salmo 66.

Sábado 31 de Julio del 2021

Juan, el profeta, demostró que fue valiente para la denuncia. No dejo un gran ejemplo: Que de sus labios no se asome la adulación y la mentira.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 14, 1-12, nos describe  como Juan Bautista fue víctima de la prepotencia corrupta del gobierno de Herodes, quien le ha condenado sin justa causa y fue muerto durante un banquete por dar cumplimiento a unos caprichos de su hija que por petición de su esposa Herodías, le pidió decapitar y que su cabeza fuese presentada en una bandeja ante los invitados.

Herodes no quería ejecutar a Juan Bautista, pero se dejó convencer, mostrando así, su debilidad.

Juan Bautista fue un hombre que se consagró totalmente a Dios y fue el precursor del anuncio de la llegada del Hijo de Dios. Él, murió por causa de la verdad al denunciar el adulterio del Rey y el de su esposa Herodías. 

Cuantos hoy pagan caro el compromiso con la verdad. Hombres y mujeres que se atreven a ir en contra de las corrientes de las injusticias, la maldad y la corrupción. 

Juan Bautista es hoy un gran ejemplo para todos nosotros por la valentía que demostró por defender la verdad; actitud que hemos de asumir frente a nuestras jornadas de evangelización, donde vemos palpable los efectos de la corrupción y el desprecio de los gobiernos para darle una mejor calidad  de vida a quienes lo necesitan. 

Que este gran ejemplo nos llene de firmeza y nos ayude a desviarnos de las actitudes egoístas y no seamos ciegos y sordos ante estas realidades. 

Señor Jesús, ayúdanos a estar atento a la llamada que nos haces a través de los acontecimientos y las personas; que confíenos siempre en tu perdón y en nuestra  capacidad de rehacer la vida.

 "Aclamen a Dios nuestra fuerza"...Salmo 80.

Viernes 30 de Julio del 2021

La adhesión que Jesús nos exige es “otra historia”: apertura sincera, búsqueda honesta, disponibilidad a sus propuestas, trabajo en coherencia... y, todo ello, animado y apoyado por Él mismo, por su Espíritu.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 13, 54-58, vemos a Jesús llegar a su tierra Nazaret y se puso a enseñar en la Sinagoga, pero, la actitud que toma su pueblo aunque pareciera que causaba admiración por la sabiduría con que se expresaba, esta termina siendo de un total rechazo. 

Dice el texto del Evangelio que: "Ellos se sentían asombrados y decían: "¿De dónde saca este su saber y sus milagros?, ¿No es este el hijo del carpintero?, ¿No se llama su madre María y sus hermanos Santiago, José, Simón y Judas?. Sus hermanas, ¿No viven entre nosotros?, ¿De dónde saca todo eso? Y Jesús les respondió: "A un profeta solo lo desprecian en su patria y en su casa" Mt 13, 54- 57.

Sus amigos, familiares y paisanos no disimulan el desconcierto y su rechazo, porque no creen como ese, de una familia humilde y sencilla le brille tanta sabiduría para comunicar un  mensaje saludable de esperanza y buena nueva del Reino de Dios. 

El Evangelio de hoy nos interpela y pide de nosotros respuestas; y nos invita a fortalecer nuestra conversión con una Fe firme y sólida para cambiar nuestros planes personales cargados de actitudes egoístas; esas que se han sembrado en nuestro  corazones y que están  llenos de  placeres mundanos. 

Si, nos cuesta reconocer muchas veces las virtudes de nuestros hermanos, amigos y vecinos; y entramos fácil a la negación  de lo que de ellos hemos visto y de lo que, en muchas ocasiones, hemos sido testigos; simplemente, porque según nuestros criterios y perjuicios personales, no proceden de las personas que creemos capaces. 

Estas son las raíces de la mezquindad, el egoísmo y la soberbia porque no toleramos que otro nos superen.

La Fe y la Confianza nos ha de poner en movimiento y nos ha de impulsar a cambios de actitudes con compromisos radicales para dar a conocer la verdadera cara de Cristo a los demás.

Que ninguna dificultad frene nuestro amor a Ti, Jesús. Queremos testimoniar tu amor con valentía. ¡Danos la fuerza de tu Espíritu!

"¡Qué deseables son tus miradas, Señor del universo!"...Salmo 83.

Jueves 29 de Julio del 2021

Jesús llora. Quizás porque son pocos sus amigos de verdad. Porque quizás son pocos los que han muerto a su egoísmo para que El viva en sus corazones. Jesús sólo podrá resucitar a quien antes haya muerto.

En el día que la Iglesia celebra a Santa Marta; ésta, nos presenta el Evangelio tomado de Jn 11, 19-27 en la que Jesús nos comunica una de sus verdades más sublimes y consoladoras:  La vida después  de la muerte donde reinará solo la alegría total y abundante para siempre. 

Dice el texto del Evangelio que " Jesús llega a visitar a Marta y a María para darle el pésame por la muerte de su amigo Lázaro; y cuando Marta oyó que Él llegaba, salió a su encuentro, mientras María se quedaba en casa. Marta le dijo a Jesús: "Si hubieras estado aquí, Señor, mi hermano no habría muerto" Jesús le respondió: "Tú hermano resucitará...Yo soy la resurrección y la vida. Quien crea en mi, aunque muera vivirá; y quien vive y cree en mi no morirá para siempre" Jn 11, 19-26.

La frase que le dice Jesús a Marta va más allá de esa experiencia que vivirá Lázaro, porque aunque sea resucitado verá nuevamente  la muerte y es entonces, cuando se cumplirá la promesa de Jesús sobre la resurrección verdadera, donde vencerá la muerte y el alma de Lázaro vivirá para siempre. 

Muchos de nosotros hemos experimentado el dolor que causa una muerte de un ser querido y ante ese trauma doloroso, dudamos de Dios y hasta de nuestra Fe.

Como cristianos debemos sentirnos fortalecidos y agarrados de la mano de Jesús, quien nos asegura que la muerte será vencida y todos resucitaremos un día. 

Tenemos que ser como Marta quien le dijo a Jesús: " Maestro, yo creo que tú eres el Hijo de Dios y quien cree en ti, no morirá para siempre"

Jesús, aumenta nuestra fe. Queremos creer con sencillez, pero con firmeza, que Tú eres nuestro Dios y que estás realmente presente en la Sagrada Eucaristía. 

"¡Santo eres, Señor, Dios nuestro!"...Salmo 98.

Con gran sabiduría se dirige a la gente diciéndoles: " El Reino de los Cielos se parece a un tesoro escondido en un campo: lo descubre un hombre, lo vuelve a esconder y, lleno de alegría, vende todas sus posesiones para comprar aquel campo. El Reino de los Cielos se parece a un comerciante de perlas finas: al descubrir una de gran valor, va, vende todas sus posesiones y la compra" Mt 13, 44-46.

Con ello, Jesús nos afirma que el Reino de Dios no es algo que es visible o se ve con claridad, sino que es algo que se encuentra oculto a la mirada  humana y que está más allá de las apariencias o características  que le demos a una persona o alguna cosa.

Que fácil es para nosotros adiestrarnos con gran rapidez en los negocios que nos ofrece la gente y el mundo, porque lo primero que se nos viene a la mente es medir las ganancias materiales y las tangibles. 

En cambio, los que persiguen los bienes espirituales solo miden sus ganancias a través de la Fe, la Esperanza y el Amor.

De ello, Dios nos ha provisto de todos estos medios para encontrarlo, y es con : La Palabra, los Sacramentos y las personas de buena voluntad que viven o han vivido una vida ejemplar y santa.

Entonces hermanos, nuestro compromiso es ayudar a otros a descubrir ese gran tesoro escondido en nuestra  humanidad y de esto, es lo que a grito nos aclama Jesús hoy en este Evangelio: Llegar al corazón de los hombres para formarlos a ser capaces de con sus esfuerzos y dedicación puedan encontrar en el campo del mundo, el verdadero sentido de la vida que nos llevará a ser dignos del Reino del amor, la justicia y la paz.

No olvidemos que la única perla preciosa es Cristo,  y quien lo posee conocerá  su gran valor.

Señor, que no nos cansemos nunca de buscarte, queremos que nos ayudes a que te permitamos entrar más adentro de nuestro ser, en la espesura de tu amor. Acompáñanos por los caminos de la vida, para que no caigamos en las esclavitud de las modas, sino que Tú seas el TESORO que ilumina toda nuestra existencia.

"El Señor es compasivo y misericordioso"...Salmo 102.

Martes 27 de Julio del 2021

Jesús nos sigue ofreciendo  inmensas lecciones al estilo del Padre Dios, de quien Él mismo es el rostro visible y tangible: su generosidad en la siembra, su paciencia sin límites, su apuesta por el hombre, en quien sigue creyendo...

Al volver a casa, los apóstoles le piden una explicación sobre la parábola de la Cizaña que acaba de expresar a la multitud; y Él, le responde: "El que sembró la semilla buena es el Hijo del Hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos del Reino; la cizaña son los súbditos del maligno; el enemigo que siembra es el Diablo; la cosecha es el fin del mundo; los cosechadores son los Ángeles. Como se junta la cizaña y se echa al fuego, así sucederá al fin del mundo" Mt 13, 36-40.

Jesús les explica que su Misión consiste en sembrar gestos de bondad y de justicia, y para que el pueblo le entienda utiliza de manera sencilla estas parábolas  apropiada al diario vivir agrícola de ese entorno.

Él como la semilla desea transformar calladamente  las formas como venimos caminando en el mundo porque quiere darle un matiz diferente a la vida para que en ella, exista la dignidad, la justicia y el amor fraterno. 

Él como en ese tiempo, hoy quiere que tú y yo seamos hombres libres y capaces de ser también sembradores de vida nueva en todos los lugares donde estemos; que seamos fermento de dignidad y de fraternidad donde predomine el poder, la imposición y los privilegios. Que seamos valientes guerreros para el mundo de hoy.

Señor Jesús, ayúdanos a proteger las buenas semillas de vida eterna y de amor que has plantado en nosotros y las que los demás nos ofrecen. 

"Dad gracias al Señor porque es bueno "...Salmo 105.

Lunes 26 de Julio del 2021

Jesús habla de la presencia del Reino como algo insignificante y escondido, pero lleva dentro una fuerza transformadora, que ha prendido ya en la historia,  y su crecimiento es irreversible.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 13, 31-35, Jesús una vez más revela por medio de comparaciones lo que significa el misterio del Reino de Dios que se encuentra presente en la vida de toda la humanidad. 

Hoy nos trae dos de ellas: La del grano de Mostaza y de la levadura: "El Reino de Dios se parece a una semilla de mostaza que un hombre toma y siembra en su campo. Es más pequeña que todas las semillas; pero cuando crece es más alta que otras hortalizas; se hace un árbol, vienen los pájaros y anidan en sus ramas".

Con estas Palabras sencillas y muy habituales  en el medio donde se encontraba, Jesús le demuestra a la gente que el Reino es la presencia de Dios entre nosotros; que es un nuevo modelo de vida basado en el amor.

Y le hace énfasis que en el Reino de Dios, no se siguen los modelos del mundo, sino que es como un grano de mostaza que se ve pequeño,  pero que al caer en tierra buena y fértil, crece y suscita esperanza.

El también utiliza en este Evangelio, la parábola de la levadura, y les dice: " El reino de los cielos se parece a la levadura; una mujer la amasa con tres medidas de harina, hasta para que todo fermenta" y lo hace para advertirles a la gente que lo que crece no es la levadura sino la masa, porque el fin de la levadura es como la de su Palabra que hace crecer, transforma y da la libertad al hombre.

El Evangelio de hoy nos exhorta al del cambio de vida y de nuestras actitudes para parecernos más a Jesús para que  siguiéndole con firmeza y voluntad seamos capaces de brindarle a todos los que nos rodean el amor de nuestro Dios. 

“Señor Jesús, gracias porque hemos tenido la suerte de conocer la presencia del Espíritu de Dios; así, podemos colaborar con Él en el crecimiento del Reino de Dios en  el mundo”.

"Abres tú las manos, Señor, y nos sacias"...Salmo 144.

Domingo 24 de Julio del 2021

Oh Dios, Padre nuestro: Tú das a tus hijos en todas partes el alimento y los dones necesarios para una vida plenamente humana, aunque el egoísmo nos impida tantas veces repartirlos justa y fraternalmente. Que tu Hijo nos dé bondadosamente el pan de su palabra, que nutre nuestra fe, nos da su paz, nos proporciona descanso, nos da su consuelo, esperanza y alegría.

El Evangelio de hoy tomado de Jn 6, 1-15 nos presenta a Jesús en la ribera del mar de Galilea rodeado de una enorme muchedumbre. Llama a Felipe y le dice: "¿Donde compraremos pan para darles de comer? Ello lo decía para ponerlo a prueba. Felipe le respondió: Doscientas monedas de pan no bastarían para que a cada uno le tocase un pedazo. Uno de los discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro, le dice: "Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos pescados; pero ¿Qué es eso para tantos? Jesús les dijo: Hagan que la gente se siente. Y se sentaron. Los hombres eran cinco mil. Entonces Jesús tomó los panes, dio gracias y los repartió a los que estaban sentados. Lo mismo hizo con los pescados: dándoles todo lo que quisieron" Jn 6, 1-11.

Miremos algo muy interesante: Para Jesús fue suficiente que ese joven, sin nombre, ni rostro, dispusiera  en las manos de Jesús lo que llevaba. Él toma en sus manos los panes que suministró el joven, da gracias a Dios y comienza a distribuir ese alimento entre todos.

Como lo vemos, un hombre joven que fue capaz de expresar su solidaridad a través de lo único que llevaba consigo. Es este un gran ejemplo para todos nosotros hoy que nos da miedo ser solidarios y compartir lo que gratis hemos recibido de Dios.

Dejamos más bien, que la gente sufra y muera de hambre por nuestros egoísmos y vanidades. 

Hoy Jesús quiere vernos actuar y saber que tanto de lo que llevamos en nuestras mentes y corazón lo podemos compartir con otros que lo necesitan.

¿Somos capaces de dar la vida si fuese necesario por el Señor?

"Ofrece a Dios un sacrificio de alabanza "...Salmo 49.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 13, 24-30, Jesús le habla una vez más a la multitud a través de esta parábola: "El Reino de los cielos es como un hombre que sembró semilla buena en un campo. Pero mientras la gente dormía, vino un enemigo y sembró cizaña en medio del trigo, y se fue. Cuando el tallo brotó y aparecieron las espigas, también apareció la cizaña. Fueron entonces los sirvientes y le dijeron al dueño: Señor, ¿no sembraste semilla buena en el campo?, ¿de dónde le viene la cizaña? Él les contesto: Un enemigo lo ha hecho...Por último le dijo a los cosechadores: Dejen que crezcan juntos hasta la cosecha. Cuando llegue el momento les diré: "Arranquen primero la cizaña..... luego recojan el trigo y guárdenlo en mi granero".

Hoy utiliza un campo donde su dueño viene sembrado semillas que poseen por dentro una fuerza imposible  de percibir pero que es vital para madurar, nacer, crecer y dar los frutos esperados.

En el texto también notamos, que en el proceso de crecimiento, a su lado, nacen y crecen plántulas de cizañas; pero, a pesar de todos los obstáculos que le puedan significar, el trigo nace y se desarrolla dando los frutos esperados por estar sembrado en el terreno adecuado y bien preparado.

¿Ello que significa para nosotros hoy?

Miremos: Hoy Jesús escoge una semilla pequeña; para mostrarnos que tenemos que convencernos que para seguirle de verdad no es preciso soñar en cosas grandes ni cargos importantes donde soñemos en los  reconocimientos y premiaciones. 

Él nos pide ser sencillos, pequeños y humildes de corazón para dar el ciento o setenta o el treinta que nos habla la parábola del Sembrador, porque el Reino de Dios se desarrolla donde el hombre se hace pequeño y realiza su voluntad. 

“Señor Jesús, Tú nos enseñas cómo es el actuar de Dios-Padre: paciente y misericordioso. Ayúdanos a que aprendamos esa lección y la viva cada día en mi vida”.

"Bendigo al Señor en todo momento "...Salmo 33

Viernes 23 de Julio del 2021

La parábola nos habla hoy a cada uno de nosotros, como les hablaba a los oyentes de Jesús dos mil años atrás. Nos recuerda que nosotros somos el terreno donde el Señor echa incansablemente la semilla de su Palabra y su Amor. ¿Con qué disposición la acogemos?

En el Evangelio de tomado de Mt 13, 18-23, Jesús explica a sus discípulos lo que significa la parábola del Sembrador, y les dice: "Escuchen: Si uno escucha la palabra del Reino y no la entiende, viene el maligno y le arrebata lo sembrado en su corazón...Lo sembrado en tierra fértil es el que escucha la palabra y la entiende. Ese da fruto: ciento o setenta o treinta " Mt 13, 18-20, 23.

Jesús hace una llamada y nos pide tener los oídos bien dispuestos para escucharlo, entenderlo y dejarse guiar por Él.

Cuando leímos el texto del Evangelio donde se describía la parábola del Sembrador (Mt 13, 1-9, reflexionado el día miércoles 21 de Julio), pudimos ver que esta se  inicia con estas palabras: "Salió el Sembrador a sembrar". Con este enunciado podemos percibir que esa acción de siembra la ejerce Jesús cada día a través de nosotros; y que su deseo es multiplicador a todos los hombres, en todos los lugares y de manera especial entre la gente sencilla que se muestra dispuesta a acoger y cuidar la semilla hasta verla prosperar y convertida en un árbol frondoso.

Ser evangelizador es ser multiplicador, es ser propagador del fuego que se lleva impregnado en el corazón y quien vive ese dinamismo vive la pasión y la fuerza arrolladora del Espíritu Santo.

Estamos invitados pues a ser tierra fértil para acoger la buena semilla del Sembrador para dar frutos abundantes.

“Señor Jesús, necesitamos tu Espíritu para comprender lo que nos ofreces y para fructificar como Tú esperas de nosotros y nuestros hermanos lo necesitan”.

"Mi alma está sedienta de ti, Dios mío "...Salmo 62.

Jueves 22 de Julio del 2021

De los signos visibles de la ausencia de Jesús (la tumba vacía), María Magdalena tiene que pasar al encuentro personal, a esa presencia viva. Sólo cuando Jesús mismo la llama por su nombre “¡María!”, es cuando se produce ese encuentro que transforma y pasa a ser testigo del Resucitado: “Anda, vete y diles a mis hermanos...”

Hoy celebra la Iglesia a Santa María Magdalena; una distinguida discípula de Jesús considerada por San Juan Pablo II en 1988 en la carta Mulieris Dignitatem como la "Apóstol  de los Apóstoles". Fue declarada Santa el 10 de junio del 2016 por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos.

El Evangelio de hoy tomado de Jn 20, 1, 11-18 nos presenta la aparición de Jesús a María Magdalena. 

Dice el texto del Evangelio que "estando aún muy oscuro, llega al sepulcro y observaba que la piedra que tapaba el sepulcro estaba retirada y estando fuera de él, se puso a llorar. Mientras lloraba se inclinó hacia el sepulcro y ve dos ángeles vestidos de blanco sentados: uno a la cabecera y otro a los pies del lugar donde habían puesto el cadáver y le dicen: ¡Mujer! ¿Por qué lloras?. Ella les respondió: "Porque se han llevado a mi Señor y no se donde lo han puesto" y al dar media vuelta ve a Jesús de pie, pero no lo reconoce. Jesús le dice: "¡Mujer! ¿Por qué lloras?, ¿A quién buscas?" Ella creyendo que era el jardinero, le dice: "Señor si tú te lo has llevado, dime dónde lo has puesto y yo iré a buscarlo. Jesús le dice: "¡María! Ella se vuelve y dice en hebreo: Rabbuni, que significa Maestro" Jn 20, 11-16.

Ella, en su oscuridad, toma la decisión de ir al sepulcro para encontrar alivio en aquel que le había robado la  muerte. 

Así, lo vivió María Magdalena desde su búsqueda llena de dolor, hasta su reencuentro con Jesús Resucitado. 

Mirémonos en una situación  similar. Algunas veces sentimos que la vida se nos viene al piso, se desmorona y parece que todo termina. Si, llega a nuestro entorno la muerte, las enfermedades como la pandemia del covid19 que nos ha sumido en una crisis nunca antes vivida, pero de repente nos volvemos a encontrar   con una persona amiga que nos hace revivir y nos lleva a descubrir que el amor es más fuerte que toda derrota. 

Pidámosle al Divino Salvador que nos ayude a reconocerlo Vivo y Resucitado en nuestras situaciones difíciles y dolorosas como también, entre esos hermanos nuestros que nos quieren y desean ayudar. 

"El Señor les dio pan del cielo "...Salmo 77

Miércoles, 21 de Julio del 2021

Dios siembra con generosidad la semilla. Tanto el sembrador como la semilla tienen la fuerza por dentro si se dan las condiciones para una cosecha fructífera. Ese “poder” tanto del sembrador como de la semilla, queda “condicionado” por el tipo de tierra donde se va a dar la siembra.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 13, 1-9, nos regala la parábola de un Sembrador que está dispuesto a regar sus semillas en cualquier terreno y se regocija con tal que su cosecha produzca algo.

Dice el Evangelio que "un día Jesús salió de casa y se sentó junto al lago y a su alrededor se juntó mucha gente, así que tuvo que subirse en una barca y se sentó en ella mientras la gente estaba de pie en la orilla y se puso a enseñarles muchas cosas con parábolas. Al terminar esta (Parábola del Sembrador), les dijo: "El que tenga oídos que escuche" Mt 13, 1-3, 9

Muchas veces esta parábola  la hemos leído y la hemos escuchado; sin embargo, seguimos siendo superficiales porque nos dejamos llevar por las corrientes de la apatía y el desencanto que nos impide centrarnos en lo que es importante.

Jesús llega hoy a la orilla del  lago de nuestras vidas y desea entrar en ella timoneando su barca. 

Él no quiere entrar como un extraño sino como nuestro amigo. Quiere darnos a entender que la fuente de la vida está en su Palabra. Ella, es el alimento vital.  

Por tanto el Evangelio de hoy, nos anima a volver a la fuente viva para escuchar y abrir los oídos para así, darle profundidad y dirección a lo que hacemos. 

Tenemos pues que dejar de lado la comodidad y la pasividad para subirnos en la misma barca de Jesús,  escuchándolo, entendiéndolo y aplicando lo que nos enseña. 

“Señor Jesús, tienes toda la razón cuando nos propones la parábola del sembrador. Pero… ¡no te canses de sembrar en nosotros, que somos un tanto torpes a la hora de entender y de vivir lo que nos propones”. 

"Cantaré al Señor, sublime es su victoria"...Salmo Ex.15.

Martes 20 de Julio del 2021

Jesús, libre de toda atadura, se siente abierto completamente a la nueva realidad, no vinculada a la carne y sangre, sino surgida desde la oferta de Dios y realizada en la acogida abierta al proyecto del Padre Dios.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 12, 46-50 nos relata un episodio donde vemos a Jesús ampliar el concepto de lo que representa la madre y los hermanos como una comunidad que acoge a todos libremente por la fe. El toma a la familia como el medio natural para seguir la voluntad de Dios. 

Dice el texto del Evangelio que "Estando todavía hablando Jesús a la multitud, su madre y sus hermanos que estaban afuera, deseosos de hablar con Él, uno de los presentes,  le dijo: "Mira, tu madre y tus hermanos están a fuera y desean hablar contigo. El respondió:¿Quien es mi madre? ¿Quiénes son mis hermanos?; y señalando con  la mano a sus discípulos, dijo: "Ahí están mi madre y mis hermanos! Cualquiera que haga la Voluntad de mi Padre del cielo, ese es mi hermano, mi hermana y mi madre" Mt 12, 46-50.

No podemos olvidar al reflexionar este Evangelio que en la época de Jesús (cultura hebrea) la palabra "hermano" era aplicada para designar un rango extenso de familiares y parientes. 

Pues bien, quienes reconocemos a Dios como Padre, por fe, nos identificamos con Jesús que involucra en ese mismo reconocimiento a su madre y a sus hermanos.

Que esas Palabras de Jesús  no nos confundan ni tampoco las interpretemos como un desaire a su madre, sino que es un halago de aprecio y consideración por haber sido fiel al cumplimiento de la voluntad de Dios: Formar comunidad.

La nueva familia de Jesús está abierta a la humanidad entera.  Si, es abierta con los que aceptan un compromiso semejante al suyo y con ellos, estrecha lazos de intimidad. 

"Cantaré al Señor, gloriosa es su victoria"...Salmo Ex 15.

Lunes 19 de Julio del 2021

Jesús se resiste a ser manipulado y a ser utilizado al servicio de sus intereses; Él ha obrado y sigue obrando signos claros de salvación, pero siempre a favor de los que sufren y están necesitados.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 12, 38-42, podemos apreciar a un grupo de Fariseos y Letrados que se acercan a Jesús para pedirle una señal  para creer que verdaderamente era el enviado por Dios que tanto tiempo habían esperado.

Jesús, les responde con firmeza llamándoles: "Generación perversa" y les recuerda que para lograr conocerle y saber que es el Hijo de Dios es necesario seguir el "Signo de Jonás " es decir, "ser Misericordiosos".

Pero, Jesús con su sabiduría les hizo ver que el único signo que les daba era el de Jonás, refiriéndose a esa enfermedad de la hipocresía   que simulaban y que venían  asumiendo como "una religiosidad perfecta". 

Para ti y para mi hoy, el signo de Jonás al que se refiere Jesús  es al que estamos invitados hoy: Que nuestra salvación sea lograda a través de obras cargadas de amor sin límites y donde se refleje la luz  de la compasión y de la misericordia.

Con este Evangelio Jesús desea purificar nuestras intenciones y para ello nos pide forjar una fe adulta y una confianza absoluta en El para entregarnos a su voluntad.

“Señor Jesús, tu vida y tu mensaje justifican nuestra fe en Ti; te aceptamos como Camino, Verdad y Vida”.

"El Señor es mi Pastor, nada me falta "...Salmo 22

Domingo 18 de Julio del 2021

Es hermoso, de veras, descubrir a un Jesús tan humano, tan delicado con la situación de cada persona. En ocasiones, parece que tiene prisa por anunciar el proyecto del Padre; en otras, invita a ir a un despoblado "a descansar".

El Evangelio de hoy tomado de Mc 6, 30-34 nos describe  una situación que se ha presentado con los discípulos que llegan de realizar la experiencia de la Misión. Ellos le comentan a Jesús lo que habían hecho y enseñado, pero, que se sienten muy cansados.

Jesús les comprende y les invita a tener un poco de descanso y les dice: "Vengan ustedes solos, a un paraje despoblado, a descansar un rato" y se embarcaron con Él, pero al verle marchar, la gente que les seguían corrieron hacia el lugar donde iban a desembarcar; "y al ver Jesús ese gran gentío y se compadeció de ellos porque parecían ovejas sin pastor y se puso a enseñarles".

Miramos en el texto cuatro imágenes que suceden: el ver, el tener, la compasión y la enseñanza. 

Los dos primeros se asocian a la actitud de Jesús y los otros dos, muestran la ternura de Dios manifestada en el Maestro que aprovecha la situación para enseñar y nutrir a la gente con sus propuestas.

¡¡¡Que significativo ejemplo para todos nosotros!!!

Este Evangelio de hoy nos exhorta a que aprendamos a mirar a la gente como lo hacía Jesús. Miremos como Él captaba cuantos de ellos venían sufriendo, como lo iban apartando por las clases pudientes y gobernantes  y como eran sumidos al abandono de todo tipo cultural, social y religioso. Y es allí precisamente, donde podemos aprende a sentir la compasión. 

Entonces, es necesario ser amigos y compañeros del Buen Pastor, para aprender de Él a no  ser indiferentes ante las necesidades de la gente; y que la voz de Dios transmitida de manera sencilla y responsable, sean para ellos y nosotros el mejor de los alimentos para aprender, enseñar y apoyar a los que más lo necesitan a vivir una mejor calidad de vida.

“Jesús, tu nos enseñas a estar siempre disponible y a ser capaces de renunciar a nuestros planes cuando se presenten otras necesidades más urgentes. Haz que sepamos escuchar a los que nos necesiten”. 

"Porque es eterna su misericordia"...Salmo 135.

Sábado 17 de Julio del 2021

SEGUIR AL SALVADOR REQUIERE DE NOSTROS UNA PROFUNDA CONVERSION Y UN CAMBIO TOTAL DE NUESTRAS VIDAS.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 12, 14-21, podemos ver que los Fariseos llenos de envidia; y atacados por la ira planean darle muerte a Jesús, pero Él, al enterarse, de manera prudente se aleja frente a la actitud de sus enemigos, pero disfruta de su servicio al pueblo que se encuentra necesitado y lo hace de manera desinteresada; y como lo dice el texto del Evangelio: "Muchos lo siguieron y a todos los enfermos que les presentaban les curaba y les ordenaba severamente que no lo dieran a conocer" Mt 12, 15-16.

Él No grita, no vocifera, no requiere de aplausos, ni de alabanzas y como lo dice el texto del profeta Isaías: "No quiebra la caña débil, no apaga la vela vacilante, hasta que haga triunfar la justicia" Mt 12, 20.

Estas palabras de Jesús nos han de dejar una gran enseñanza:

Seguir al Salvador requiere de cada uno de nosotros una profunda conversión, un cambio en el modo de pensar, de actuar y de vivir. Requiere de nuestra disposición para estar siempre dispuestos a abrir el corazón a la escucha de su Palabra y dejarnos iluminar y transformar por ella.

Es entonces el momento de unir todos los esfuerzos y poner lo mejor de nosotros para que cada una de nuestras decisiones y compromisos sean por el bien y la defensa de los más necesitados. 

“Señor Jesús, libéranos de la cerrazón del corazón, y que aceptemos cada día tu estilo de ser y de vivir, para que así te podamos seguir con todas las consecuencias”.

"Alzaré la copa de la salvación, invocando el nombre del Señor "...Salmo 115.

Viernes 16 de Julio del 2021

LA MISERICORDIA NOS ABRE EL CORAZON PARA SER CARITATIVOS Y HUMANITARIOS PARA ACOGER, COMPARTIR Y APOYAR A LOS MAS NECESITADOS.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 12, 1-8,  nos relata el acontecimiento sucedido, cuando Jesús atravesaba junto a sus discípulos un campo de trigo en día sábado. Dice, que los discípulos tenían mucha hambre y se pusieron a arrancar las espigas y a comérselas. De inmediato, los Fariseos le criticaron, diciendo: " Mira, tus discípulos están haciendo en sábado una cosa prohibida", Jesús reaccionó  y les trajo a colación lo que David hizo junto a sus compañeros cuando estaban hambrientos; y al final les dijo: "Aquí hay alguien mayor que el templo. Si comprendieran lo que significa: Misericordia quiero y no sacrificios, no condenarían a los inocentes. Porque el Hijo del Hombre es Señor del sábado" 

Jesús les muestra que ellos han creado muchas leyes que obligan y oprimen al hombre sencillo, mientras ellos, como autoridades, son los primeros en incurrir en faltas y delitos mayores.

Él les recalca la importancia de la Misericordia y lo que ella significa. 

La Misericordia es compasión es tener un corazón caritativo y humanitario; nos abre a vivir el amor puro, nos invita a acoger, compartir y apoyar a quien vive las necesidades  y el abandono. 

¿Cómo vivo la Misericordia hacia los demás? ¿Actúo como los Fariseos que están apegados a las leyes y preceptos?

“Señor Jesús, Tú nos propones entrar a formar parte de la Nueva Familia. ¡Acepto gustoso! Que la clave de nuestras vidas sea la misma que la tuya: cumplir la voluntad del Padre del cielo”.

"El Señor se acuerda de su alianza eternamente "...Salmo 104.

Jueves 15 de Julio del 2021

Acoger las enseñanzas de Jesús no significa, en efecto, cargar con un cúmulo de normas a observar, sino aprender de él la sencillez y humildad de corazón, que hacen más llevadera la prueba y más leve la tribulación.

Hoy en el Evangelio de Mt 11, 28-30, Jesús les propone a quienes estén en disposición de seguirle que tengan una relación íntima con Dios a partir de la humildad y la mansedumbre. 

Y les dice: "Vengan a mi, los que están cansados y agobiados, y yo los aliviaré. Carguen con mi yugo y aprendan de mi, que soy manso y humilde de corazón y encontrarán descanso para sus vidas. Porque mi yugo es suave y mi carga es ligera "

Con estas palabras Jesús sitúa al pueblo que se muestra sencillo e ignorante   frente al monopolio de los considerados "poderosos gobernantes" por la serie de leyes y doctrinas que les resultaban agobiantes y muy pesadas, y les pide que permanezcan a su lado para que aprendan de Él su mansedumbre y su humildad.

"Vengan a mi" Palabra que nos llena de confianza, esperanza e ilusión; porque quien se acerca a Jesús encuentra el descanso a las preocupaciones, inquietudes y sufrimientos. 

Preguntémonos: ¿Cómo es nuestra amistad con Jesús?, ¿Le estamos ofreciendo descanso en nuestros corazones? ¿Cómo me veo frente a los que hoy sufren la opresión y la esclavitud?.

Vayamos al encuentro de Jesús pero no para evadir lo que somos, sino para tomar fuerzas, renovarnos y dejar que nos sane, nos restaure y libere.

"El Señor es Compasivo y Misericordioso"...Salmo 102.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 11, 25-27, nos presenta a Jesús en un acto de gratitud con el Padre por todo lo que ha hecho en Él, y también, por haberlo escogido para darlo a conocer a la humanidad. Así, lo exclama: "¡Te alabo, Padre, Señor del cielo y tierra, porque, ocultando estas cosas a los sabios y entendidos, se las diste a conocer a la gente sencilla " Mt 11, 25.

Su oración revela su corazón abierto y lleno de humildad para pedir al Padre, que frente a la ignorancia y la exclusión, brote en las gentes la semilla de la voluntad, para puedan transformarse y hacerse como niños. 

Jesús en sus relaciones con el pueblo ha conocido muy bien  las actitudes y procederes de los que se consideran "importantes " frente al pueblo, pero, observa que entre ellos hay hombres sencillos y abiertos a Dios. De allí, que exprese en su oración: " Estas cosas, se las has dado a conocer a la gente sencilla " 

¿Dónde nos colocamos nosotros? Sería una buena pregunta para nosotros hoy. ¿Será que nos creemos sabios e inteligentes y como tales, nos  negamos muchas veces a aceptar a otros que se acercan a nosotros con sencillez para decirnos que quieren vivir la verdad y que buscan un mensaje de esperanza para encontrar a ese Dios cercano y bondadoso?

Y miren, quienes comprendemos el sentido del Reino de Dios, siempre estaremos abiertos y actuaremos con sencillez de corazón. Estaremos dispuestos a la acción del Espíritu Santo que se hace visible en lo imprevisible.

“Señor Jesús, haznos humildes y sencillos para acoger con amor y confianza lo que nos has revelado sobre Dios y sobre la persona humana”.

"Los humildes, buscan al Señor, y revivirá vuestro corazón "...Salmo 68.

Martes 13 de Julio del 2021

Aquí tenemos nosotros, un desafío: Jesús siempre nos sorprende, porque su estilo, su mensaje adaptado a cada momento y a tantas situaciones de vida, su propuesta arriesgada y con aire de radicalidad y exigencia, sus promesas futuras, nos invitan a que hay que esperar.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 11, 20-24 percibimos las sensaciones de rechazo que experimenta Jesús en las ciudades de Corazin, Betsaida y Cafarnaún, lugares donde Él vivió, enseñó y realizó muchas curaciones; pero, sus actuaciones no fueron capaces de convencerles para que le reconocieran como el Hijo de Dios.

Jesús les echa en cara la falta de Fe y su falta de conversión al no creerle, y les dice: "¡Ay de ti, Corazín, ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros realizados entre ustedes se hubiesen hecho en Tiro y Sidón, hace tiempo habrían hecho penitencia vistiéndose humildemente y cubriéndose con ceniza" Mt 11, 21. 

Severa y fuerte afirmación de Jesús hacia esos dirigentes que habían hecho lo imposible para cerrar las puertas al modo abierto y sencillo que promovía  Jesús para mostrar a un Dios cercano y misericordioso que ofrece a todos y sin distingo alguno, la salvación a los pueblos.

Y miren, el único deseo de nuestro Dios es salvar muchas almas; pero, como lo hemos visto en este Evangelio, el problema radica en los hombres  que quieren dictar normas y leyes acomodadas para llegar a una supuesta salvación. 

Pero,  a pesar de tanta indiferencia, Jesús no se amilana ni se cansa de insistirnos y de llamarnos. Él es quien nos pide que le demos aunque sea una sola migaja  de nuestro amor; porque bien lo sabe, que somos capaces de dar mucho más.

Pidámosle a Jesús para que  sea nuestra luz y guía en el camino de la vida y podamos ser hombres y mujeres de una Fe firme y adulta. 

"Nuestro auxilio es el nombre del Señor "...Salmo  123.

Lunes 12 de Julio del 2021

Aceptar a Jesús conlleva la cruz, porque Él asume la cruz de sus hermanos, se hace solidario. Quien no entienda y acepte este planteamiento, no podrá ser su seguidor.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 10, 34-11. Jesús utilizando un lenguaje figurativo le dice a sus discípulos: "No piensen que he venido a traer la paz a la tierra. No vine a traer la paz sino espada" Mt 10, 34.

A nosotros hoy nos parece contradictorio y duro este mensaje de Jesús porque a Él, le hemos visto a través de los Evangelios, como el portador del amor y de la paz; y nos cuesta tener una identificación con este planteamiento. Pero ello no es así, porque lo que quiere decirnos Jesús a ti y a mi es que, para ser sus verdaderos seguidores, es necesario renunciar a todas esas cosas que tanto apreciamos y que nos desvelan creando en nosotros desasosiego.

Jesús conoce la idiosincrasia  del hombre y sabe muy bien  que muchos vivimos ciertas incomprensiones por haber escogido opciones de vida que son diferentes a los que otros están acostumbrados.

Pues bien, no creamos que la fe es cosa decorativa y que hay que portarla en nuestros pechos para demostrar a otros que resplandecemos con ella. Los que piensan así se equivocan, porque la fe no es cosa de fanatismos religiosos; ella se vive y se manifiesta  cuando elegimos a Dios como centro de nuestras vidas.

No podemos olvidar que Jesús es paz y reconciliación; y que para llegar a  obtenerlo, hay que vivirlo, renunciar a los males del mundo como el egoísmo, la avaricia, la corrupción y a las injusticias. Es decir, renunciar a todos nuestros intereses particulares.

Preguntémonos: ¿Estamos dispuestos a sembrar el amor, la paz, renunciando a nuestros intereses personales?

“Señor Jesús, la vida nos ha enseñado que seguirte es exigente y con frecuencia difícil; pero nos da mucha paz y nos ayuda a vivir, porque nos sentimos queridos por Ti y por muchos otros”.

"Muéstranos, Señor, tú misericordia y danos tú salvación "...Salmo 84.

Domingo 11 de Julio del 2021

¡No hay mayor regalo, mayor dignidad que haber sido elegido por Jesús para compartir su misión: aquella que él realizó en la tierra y que gracias a su Espíritu, sigue presente y actuante en la historia del mundo, hasta el fin de los siglos! 

El Evangelio de hoy tomado de Mc 6, 7-13, nos invita a que nos sentemos hoy unos instantes para meditar y discernir con toda seriedad y disposición, nuestra experiencia vocacional que hemos vivido desde el llamado y envío, que nos fue hecho por Jesús. 

Miremos lo que dice el texto: "Jesús, llamó a los doce y los fue enviando de dos en dos, dándoles poder sobre los espíritus inmundos" Mc 6, 7. También, les dijo: "Cuando entren en una casa, quédense allí  hasta que se marchen. Si en un lugar no los reciben ni los escuchan, salgan de allí y sacudan el polvo de los pies como protesta contra ellos" Mc 6,  10-11.

Como lo vemos, el mandato del Salvador es a no llevemos nada para el camino, pero si, a estar preparados y dispuestos a vivir en el permanente apoyo de Dios; es decir,   a apasionarnos de la vocación que vivimos y a la que hemos sido llamados.

Él desea que salgamos en camino; que seamos conscientes caminantes. No es salir para  quedarnos cómodos en un solo lugar y olvidarnos que tenemos que seguir avanzando. Tampoco podemos salir a misión como personas errantes sin rumbo y sin preparación; sin saber lo que vamos hacer. Se sale, a buscar ovejas perdidas para traerlas al redil y allí,  ayudarlas a que cambien de vida y sigan adelante por el mejor de los caminos. 

¿Confío en el equipaje que llevo sobre mis hombros y que he cultivado en la vida o voy ligero y confiado en Dios?

La pobreza nos lleva a “confiar”, a no perder la calma, aunque pase lo que pase: Dios sabe lo que necesitamos, Dios sabe cómo actuar. 

"Humildes, buscad al Señor,   y revivirá vuestros corazones"...Salmo 104

Sábado 10 de Julio del 2021

La adhesión al Señor y la confianza en la Divina Providencia constituyen los términos de la relacion vital que libera al discípulo de todo miedo y de los condicionamientos humanos.

El Evangelio de hoy es tomado de Mt 10, 24-33, Jesús exhorta a sus discípulos a no tener miedo, a llenarnos de valor, a no desanimarnos fácilmente por las circunstancias adversas y a tener confianza  absoluta en Dios. 

Jesús nos dice: "No está el discípulo por encima de su maestro ni el sirviente por encima de su señor...No teman a los que matan el cuerpo y no pueden matar el alma; teman más bien al que puede arrojar cuerpo y alma al infierno" Mt 10, 24, 28. 

Y continúa diciendo: "Por tanto, no les tengan miedo, que ustedes, valen más que muchos gorriones. Al que me reconozca ante los hombres yo lo reconoceré ante mi Padre del cielo" Mt 10, 31-32.

Jesús nos pide a ponernos en las manos de Dios confiando plenamente que Él está con nosotros en todos los momentos; a dejarnos de preocupar de las cosas materiales como también, de querer sobresalir en ser personas fervorosas y muy entregadas al culto religioso olvidando que la meta está en cultivar ambos elementos: lo material y lo espiritual.

¿A que más podríamos aspirar? Si es el mismo Jesús quien nos manifiesta que estará atento e intercede ante el Padre Dios por nosotros.

Es entonces nuestra prioridad: Reconócele abiertamente ante todos los hombres y ante todas las cosas materiales. 

Hagamos crecer nuestra Fe porque a través de ella, podemos vencer los miedos y seguir valientemente creciendo y creyendo en nuestro futuro.

“Señor Jesús, la vida y la misión no siempre nos son fáciles; a veces tenemos miedo; necesitamos tenerte presente”.

"El Señor es quien salva a los justos "...Salmo 36.

Viernes 9 de Julio del 2021

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 10, 16-23, Jesús le da a los discípulos unas instrucciones que han de tener en cuenta al poner en práctica la Misión que les asignó; y entre todas sus observaciones, se resalta ésta: "Serán odiados por todos a causa de mi nombre. Quien resista hasta el final se salvará" Mt 10, 22.

Estas Palabras de hoy nos han de llenar de una absoluta confianza, porque sabemos que no estaremos solos en el camino misional, porque como lo dice Jesús: "Cuando los entreguen, no se preocupen por lo que van a decir; pues no serán ustedes los que hablen, sino el Espíritu de su Padre hablará por ustedes" Mt 10,  19-20.

Y es que Jesús nos ha llamado a ser testigos de Él frente al mundo. Él quiere que sigamos sus pasos para llevar a todos los lugares (casa, trabajo, familias) el reino del verdadero amor, de la justicia, de la paz y de la solidaridad, siendo coherentes con la Fe que profesamos y viviendo con alegría el Evangelio.

Ser sagaces para descubrir los peligros y ser sencillos para actuar con recta intención como actuaba  Jesús. Son estas dos virtudes a las que estamos llamados hoy a practicar pues de ellas, dependen que hagamos nuestras buenas obras.

Señor, tu Palabra y tu Sabiduría están en mí, no porque te conozca mediante mis conceptos,  sino porque soy conocido por Ti  como hijo/a y amigo/a tuyo/a.

Jueves 8 de Julio del 2021

El  mundo debe ser curado de las enfermedades de autodestrucción e injusticia, y en la Encíclica de "Laudato si’ está el camino para recuperarse.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 10, 7-15 vemos a Jesús dándole unas instrucciones muy concretas a sus discípulos para realizar la Misión de revelar la presencia del Reino de Dios a toda la humanidad. 

Él les dice: " Id y proclamad  que el Reino de los cielos está cerca. Sanen a los enfermos, resuciten a los muertos, limpien a los leprosos, expulsen a los demonios. Gratuitamente han recibido, gratuitamente deben dar" Mt 10, 7-8.

En este texto hay unas palabras claves: Anunciar, Curar y Expulsar 

Anunciar: se refiere a una invitación a estar siempre en disposición de salida, a estar en constante movimiento, a no detenerse.

Curar: Es ser alivio y consuelo para los más necesitados y oprimidos. Es ser bendición para los demás. 

Y Expulsar: Es ayudar a liberar a otros para sanar las heridas profundas que les oprimen y ayudarlos a lograr una mejor calidad de vida. 

Este Evangelio de hoy, es una invitación a soñar con imaginación para construir métodos que nos inspiren promover el amor, la paz y la justicia social que tanto necesitamos hoy en el mundo. 

"Gratuitamente han recibido, gratuitamente deben dar" 

¿Qué testimonio estoy irradiando a los demás? ¿Me preocupo por solo ser un ministro más en la Iglesia y aparto a un lado el servicio a los demás?

Dar testimonio de fe es entregarse sin condiciones siendo sembrador del Reino de Dios en todas partes. 

“Nuestro egoísmo, nuestra indiferencia y nuestros estilos irresponsables están amenazando el futuro de nuestros hijos. Cuidemos de nuestra madre Tierra”. Papa Francisco.

"Que tu Misericordia, Señor,  venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti"...Salmo 32.

Miércoles 7 de Julio del 2021 

El proyecto de salvación, anunciado a través de los tiempos, está en marcha; está en acción. Jesús lo inicia; los apóstoles lo comparten y nosotros participamos en él.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 10, 1-7 , nos dice: "Jesús llamó a sus doce discípulos y les dio autoridad para expulsar espíritus inmundos y curar toda enfermedad y dolencia." Mt 10, 1.

"A estos doce los envió Jesús con estas instrucciones: No vayáis a tierra de paganos ni entréis en las ciudades de Samaría. Sino id a las ovejas descarriadas de Israel. Y de camino proclamen que el Reino de los Cielos está cerca." Mt 10, 5-7.

Esta convocatoria se hace actual hoy entre nosotros, Él nos invita a que no perdamos un solo instante para que aprendamos de Él, su Vida, sus Palabras y Acciones hasta lograr ser verdadera luz para el mundo. 

Él desea que como sus discípulos estemos en permanente salida, es decir,  en constante movimiento, para compartir un abrazo, una sonrisa, un diálogo, una escucha de manera especial con los que se sienten abandonados, para que ellos se levanten del letargo en que se encuentran y puedan alcanzar un mejor bienestar   y una mejor calidad de  vida, siempre apoyados de la unción del poder del Espíritu Santo.

“Señor Jesús, siempre nos empujas para que vayamos avanzando, pero te muestras muy respetuoso y paciente; nunca nos pides más de lo que podemos hacer. ¡Gracias por tu delicadeza!”.