domingo, julio 25, 2021

"Abres tú las manos, Señor, y nos sacias"...Salmo 144.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Domingo 24 de Julio del 2021

Oh Dios, Padre nuestro: Tú das a tus hijos en todas partes el alimento y los dones necesarios para una vida plenamente humana, aunque el egoísmo nos impida tantas veces repartirlos justa y fraternalmente. Que tu Hijo nos dé bondadosamente el pan de su palabra, que nutre nuestra fe, nos da su paz, nos proporciona descanso, nos da su consuelo, esperanza y alegría.

El Evangelio de hoy tomado de Jn 6, 1-15 nos presenta a Jesús en la ribera del mar de Galilea rodeado de una enorme muchedumbre. Llama a Felipe y le dice: "¿Donde compraremos pan para darles de comer? Ello lo decía para ponerlo a prueba. Felipe le respondió: Doscientas monedas de pan no bastarían para que a cada uno le tocase un pedazo. Uno de los discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro, le dice: "Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos pescados; pero ¿Qué es eso para tantos? Jesús les dijo: Hagan que la gente se siente. Y se sentaron. Los hombres eran cinco mil. Entonces Jesús tomó los panes, dio gracias y los repartió a los que estaban sentados. Lo mismo hizo con los pescados: dándoles todo lo que quisieron" Jn 6, 1-11.

Miremos algo muy interesante: Para Jesús fue suficiente que ese joven, sin nombre, ni rostro, dispusiera  en las manos de Jesús lo que llevaba. Él toma en sus manos los panes que suministró el joven, da gracias a Dios y comienza a distribuir ese alimento entre todos.

Como lo vemos, un hombre joven que fue capaz de expresar su solidaridad a través de lo único que llevaba consigo. Es este un gran ejemplo para todos nosotros hoy que nos da miedo ser solidarios y compartir lo que gratis hemos recibido de Dios.

Dejamos más bien, que la gente sufra y muera de hambre por nuestros egoísmos y vanidades. 

Hoy Jesús quiere vernos actuar y saber que tanto de lo que llevamos en nuestras mentes y corazón lo podemos compartir con otros que lo necesitan.

¿Somos capaces de dar la vida si fuese necesario por el Señor?

“Señor Jesús, envíanos tu luz y tu verdad, que ellas nos guíen y nos conduzcan a entender -en toda su profundidad- y a vivir -en plenitud- el don de la EUCARISTÍA. ¡Gracias por este inmenso regalo!”.

 
posted by Laureano García Muentes at 4:30 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>