viernes, septiembre 20, 2024

"Al despertar me saciaré  de tu semblante, Señor"...Salmo 17

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Viernes 20 de Septiembre del 2024

El Evangelio de hoy tomado de , nos narra que Jesús en el recorrido de su misión, siempre iba en compañía de los doce Apóstoles y de muchas mujeres a quienes había sanado de los espíritus inmundos y de sus enfermedades. 

Así nos lo narra el texto del Evangelio: "Jesús recorría las ciudades y los pueblos, predicando y anunciando la Buena Noticia del Reino de Dios. Lo acompañaban los Doce y también algunas mujeres que habían sido sanadas de malos espíritus y enfermedades: María, llamada Magdalena, de la que habían salido siete demonios; Juana, esposa de Cusa, intendente de Herodes, Susana y muchas otras, que los ayudaban con sus bienes". Lc 8, 1-3

Jesús en su plan salvífico  incluye a todos lo seres humanos y sobre todo a los que para muchos no cuentan, a los excluidos.

Como lo leemos en el texto del Evangelio, las mujeres son las protagonistas en los diferentes acontecimientos que realiza Jesús y por lo tanto, receptoras de la Buena Noticia del Reino de Dios. 

A pesar de que las mujeres en esa época no tenían valor, Jesús en su dinámica las adhiere a su proyecto y las hace parte fecunda de la salvación y capaces de generar vida nueva. 

Hermanos, Jesús nos muestra un gran ejemplo:  Él independientemente del género humano, como también del pasado o condición social, está llamado a participar en la construcción del Reino de Dios, por tanto, valoremos y promovamos esta muestra de amor de Dios  y sin condicionamiento, pongamos a disposición de todas las gentes los dones, carismas y talentos y salgamos a todos los lugares a mostrar el rostro alegre, amoroso y misericordioso de Dios para que sean muchos los que nos sigan y conozcan la persona de Jesús. 

Señor ayúdanos a aprender de los demás, ayúdanos a enseñar con nuestra vida a muchas personas. Que nuestro corazón se llene de tus regalos grandes y divinos que son la paz, el amor, la armonía, el diálogo, la comprensión y la capacidad de integrarnos todos para poder así, juntos, construir el Reino de Dios. Bendícenos y permite decirte todos los días: Aquí estoy Señor, quiero ser tu discípulo porque quiero vivir como tu viviste, haciendo el bien.

 
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jueves, septiembre 19, 2024

"Dad gracias al Señor porque es bueno"...Salmo 118.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Jueves 19 de Septiembre del 2024

El Evangelio de hoy tomado de Lc 7, 36-50, nos habla del episodio sucedido cuando Jesús, invitado por un fariseo a un banquete, ya sentado en la mesa, una mujer pecadora que vivía en la ciudad, llorando a sus pies comenzó a bañárselos con sus lágrimas  y a secárselos con sus cabellos mientras se los cubría de besos.

Así, lo describe el texto del Evangelio: "Un fariseo le rogó que comiera con él, y, entrando en la casa del fariseo, se puso a la mesa. Había en la ciudad una mujer pecadora pública. Al enterarse de que estaba comiendo en casa del fariseo, llevó un frasco de alabastro de perfume y, poniéndose detrás, a los pies de él, comenzó a llorar, y con sus lágrimas le mojaba los pies y con los cabellos de su cabeza se los secaba; besaba sus pies y los ungía con el perfume. Al verlo el fariseo que le había invitado, se decía para sí: "Si éste fuera profeta, sabría quién y qué clase de mujer es la que le está tocando, pues es una pecadora". Jesús le respondió: "Simón, tengo algo que decirte". Él dijo: "Di, maestro". "Un acreedor tenía dos deudores: uno debía quinientos denarios y el otro cincuenta. Como no tenían para pagarle, perdonó a los dos. ¿Quién de ellos le amará más?". Respondió Simón: "Supongo que aquel a quien perdonó más". Él le dijo: "Has juzgado bien". Y, volviéndose hacia la mujer, dijo a Simón: "¿Ves a esta mujer? Entré en tu casa y no me diste agua para los pies. Ella, en cambio, ha mojado mis pies con lágrimas y los ha secado con sus cabellos.". Lc 7, 36-44.

Como vemos en la  escena, Jesús acoge a una persona que, según las costumbres judías, no podía ser acogida por ser pecadora. Ahí es cuando el hombre fariseo que lo observa, lo critica y condena a la mujer. 

El fariseo piensa que no comete pecado alguno porque es buen cumplidor de la ley, pero Jesús le hace ver algo muy importante: "A quien poco se perdona, poco amor se le muestra" queriéndole decir que lo que más importa no es la observancia de las leyes sino el amor con que se cumple la ley.

La mujer reconoce ante todo que es una pecadora. Esas lágrimas que derrama son realmente sinceras y demuestran todo el dolor que aquella mujer experimentaba tras una vida de pecado, alejada de Dios, vacía. 

Hermanos, Jesús no condena sino que acoge. En el caso que nos muestra el Evangelio de hoy, fue la Fe de la mujer lo que le ayudó a recomponerse y encontrarse consigo misma y con Dios. Una nueva fuerza despertó en ella que la hizo renacer de nuevo. 

Señor,  al igual que la mujer del Evangelio, te buscamos con una gran fe. Somos conscientes de nuestras miserias y necesitamos tu perdón. No permitas que nos apartemos de Ti, porque en Ti tenemos puestas todas nuestras esperanzas. Te amamos y deseamos ardientemente compartir este amor con los demás.

 
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miércoles, septiembre 18, 2024

"Dichoso el pueblo que el Señor escogió como heredad"...Salmo 33.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Miércoles 18 de Septiembre del 2024

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 7, 31-35, Jesús describe la insensatez de la gente que se encuentran insatisfechos y reaccionan con violencia al rechazar su predicación como la que proclamaba Juan Bautista y les dice: ¿Con quien puedo comparar a los hombres de esta generación?, ¿A quién se parecen? Y ante el desconcierto al no comprender, les dice: "Se parecen a esos muchachos que están sentados en la plaza y se dicen entre ellos: ¡Les tocamos la flauta, y ustedes no bailaron! ¡Entonamos cantos fúnebres, y no lloraron! Porque llegó Juan el Bautista, que no come pan ni bebe vino, y ustedes dicen: “¡Tiene un demonio!”. Llegó el Hijo del hombre, que come y bebe, y dicen: “¡Es un glotón y un borracho, amigo de publicanos y pecadores!”. Pero la Sabiduría ha sido reconocida como justa por todos sus hijos". Lc 7, 31-35.

Jesús toma de ejemplo a los niños que juegan en la plaza, en el que uno de ellos propone un juego y un grupo de personas se lo impide; entonces uno de ellos manifiesta otro juego más serio como es el cantar lamentaciones y una vez más se lo impiden y hasta lo boicotean. Actitud que rechaza abiertamente Jesús porque ve entre la gente algo torcido y de mucha maldad que hace mucho daño. 

Entonces, viendo esas actitudes, Jesús califica a la sociedad judía que no hace caso a ningún enviado de Dios.

Hermanos, así esta también el mundo que hoy vivimos: Si, lo vemos torcido en muchas cosas y viviendo lo que no es. Hoy este Evangelio nos invita a que no desconfiemos de lo bueno que nos viene del Señor y nos pide que pensemos bien y actuemos con buenas  intenciones.

Recordernos que antes de juzgar a otro es preciso conocer a la persona y sus actos; y así, abstenerse a emitir juicios a priori. 

No olvidemos que Jesús vino al mundo a salvar a los hombres y a parecerse a él, pero menos en el pecado.

Te alabamos y bendecimos este día Trinidad Santísima, alabado seas Padre Creador, alabado sea el Hijo, Sanador, Salvador y Redentor, alabado seas Espíritu Santo, Santificador, Consolador, Transformador; este día te compadeces de esta generación confusa, distraída, envanecida, que se aleja cada día más de tus prioridades, de tu Palabra, de tus mandatos, de tu proyecto de amor. El hombre. Que tu imagen impregnada en nuestra familia, descendencia y todo el que se une a esta oración, resplandezca en sus vidas y alumbren cada espacio que habiten.

 
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martes, septiembre 17, 2024

"Nosotros somos su pueblo y ovejas de su rebaño"...Salmo 100

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Martes 17 de Septiembre del 2024

El Evangelio de hoy tomado de nos relata el Milagro de Jesús al resucitar a un muerto hijo único de una viuda cerca de la puerta de la ciudad llamada Naín.

Dice el texto del Evangelio, que: "Jesús al ver a la mujer, se conmovió y le dijo: "No llores". Después se acercó y tocó el féretro. Los que lo llevaban se detuvieron y Jesús dijo: "Joven, yo te lo ordeno, levántate". El muerto se incorporo y empezó a hablar. Y Jesús se lo entregó a su madre. Todos quedaron sobrecogidos de temor y alababan a Dios, diciendo: "Un gran profeta ha aparecido en medio de nosotros y Dios ha visitado a su Pueblo". El rumor de lo que Jesús acababa de hacer se difundió por toda la Judea y en toda la región vecina". Lc 7, 13-17.

Jesús ante el dolor se conmueve, se apiada y se conduele de la pobre viuda y le dice: "No llores más" mostrando sus sentimientos y su gran corazón cuando se encuentra con la desgracia y el sufrimiento.

Hermanos, un gran ejemplo nos muestra Jesús: Tener compasión  de todos los que sufren. Hoy vemos en este Evangelio como Jesús devuelve la vida, la ilusión, la esperanza y la confianza. Él va de pueblo en pueblo anunciando que es posible la vida y que su Palabra es para renovar la vida. 

Al detener la marcha fúnebre nos muestra que si es posible darle a la vida la vida de gracia, del amor y la esperanza; pues Dios quiere que todos vivamos ante las injusticias, la pobreza y las fragilidades.

Gracias, Señor, porque nos miras a los ojos y nos llamas por nuestros nombres y nos dices: A ti te hablo, LEVÁNTATE, levántate de tu tristeza; levántate de tu egoísmo, levántate de tu desesperanza, levántate de tus desconfianzas, levántate de todo lo que te impide vivir, de todo lo que no te dejar ser persona, de todo lo que no te deja avanzar. Señor, danos un corazón como el tuyo y ayúdanos a levantarnos para seguir tus pasos.

 
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lunes, septiembre 16, 2024

"Proclamen la muerte del Señor, hasta que vuelva"...Salmo 40.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Lunes 16 de Septiembre del 2024

El Evangelio de hoy tomado de Lc 7, 1-10 nos presenta el relato de La curación del Sirviente del Centurión que estaba enfermo y a punto de morir.

Dice el texto del Evangelio que: "Jesús entró en Cafarnaúm. Había allí un centurión que tenía un sirviente enfermo, a punto de morir, al que estimaba mucho. Como había oído hablar de Jesús, envió a unos ancianos judíos para rogarle que viniera a sanar a su servidor. Cuando estuvieron cerca de Jesús, le suplicaron con insistencia, diciéndole: “Él merece que le hagas este favor, porque ama a nuestra nación y nos ha construido la sinagoga”. Jesús fue con ellos, y cuando ya estaba cerca de la casa, el centurión le mandó decir por unos amigos: “Señor, no te molestes, porque no soy digno de que entres en mi casa; por eso no me consideré digno de ir a verte personalmente. Basta que digas una palabra y mi sirviente se sanará. Porque yo no soy más que un oficial subalterno, pero tengo soldados a mis órdenes cuando digo a uno: ‘Ve’, él va; y a otro: ‘Ven’, él viene; y cuando digo a mi sirviente: ‘¡Tienes que hacer esto!’, él lo hace”. Al oír estas palabras, Jesús se admiró de él y, volviéndose a la multitud que lo seguía, dijo: “Yo les aseguro que ni siquiera en Israel he encontrado tanta fe”. Cuando los enviados regresaron a la casa, encontraron al sirviente completamente sano". Lc 7, 1-10.

Miremos lo que nos dice el texto del Evangelio: El Centurión no era israelita pero manifestaba su amor por el pueblo y ese amor a su próximo fue la causa principal del milagro que hizo Jesús con su sirviente enfermo. 

La manifestación de la fe y de la humildad van siempre tomadas de la mano pues ellas muestran a plenitud el amor.

Ella no nos encierra, sino que nos hace abiertos, solidarios. Miren a aquel centurión no pidió para él, pidió para un criado, intercedió por él. Interceder es rezar por el otro, trabajar por el otro, dar la cara por el otro, dar voz a los que no tienen voz. Hay muchas personas que necesitan tu intercesión.

Hermanos, este Evangelio nos enseña como la Palabra de Dios nos transforma y nos lleva a disfrutar de una buena salud. Ella también,  nos impulsa a vivir un acercamiento más profundo y sincero del amor a Dios y a su misericordia, para así, traducirlo en un amor desinteresado al prójimo sin importarnos, clase social, raza o religión. 

Preguntémonos: ¿Qué puedo aprender del centurión para mi vida? ¿Me preocupo por la salud de los demás? ¿Me he puesto a pensar sobre lo que diría Jesús de mi fe? 

Señor, haz que nuestra fe sea plena, que sepamos abrirte nuestros pensamientos y sentimientos y acciones, nuestro pasado, nuestro presente y futuro, sin reservas. Señor, haz que nuestra fe sea coherente, que aceptemos las renuncias y los deberes que comporta y sepamos hacerla vida en cada momento de nuestras vidas. Señor, haz que nuestra fe sea fuerte, que maduremos ante la contradicción de los problemas y que encuentre el cimiento más firme ante quienes la rechazan.

 
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domingo, septiembre 15, 2024

"Caminaré en presencia del Señor, en el país de la vida"...Salmo 116.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Domingo 15 de Septiembre del 2024

Hoy celebra la Iglesia la Advocación de la Virgen de los Dolores y con ella se destaca los sentimientos de dolor de la Madre de Jesús que vivió en siete episodios de sufrimiento cuando acompañaba a su hijo en su misión salvífica (Estos los relatan los Evangelios). Su devoción se inició a finales del siglo XI, en el año 1239 en la Diócesis de Florencia, en la orden religiosa de los Frailes Siervos de María.

El Evangelio de hoy tomado de Mc 8, 27-35 así nos lo narra: "Jesús salió con sus discípulos hacia los poblados de Cesarea de Filipo, y en el camino les preguntó: “¿Quién dice la gente que soy Yo?” Ellos le respondieron: “Algunos dicen que eres Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, alguno de los profetas”. “Y ustedes, ¿Quién dicen que soy Yo?” Pedro respondió: “Tú eres el Mesías”. Jesús les ordenó terminantemente que no dijeran nada acerca de Él. Y comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre debía sufrir mucho y ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas; que debía ser condenado a muerte y resucitar después de tres días; y les hablaba de esto con toda claridad. Pedro, llevándolo aparte, comenzó a reprenderlo. Pero Jesús, dándose vuelta y mirando a sus discípulos, lo reprendió, diciendo: “¡Retírate, ve detrás de mí, Satanás! Porque tus pensamientos no son los de Dios, sino los de los hombres”. Entonces Jesús, llamando a la multitud, junto con sus discípulos, les dijo: “El que quiera venir detrás de mí, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; y el que pierda su vida por mí y por la Buena Noticia, la salvará”. Mc 8, 27-35.

Hermanos, así como lo hizo con sus discípulos, hoy Jesús nos pregunta a nosotros: "Y ustedes, ¿Quién dicen que soy Yo?". Como a Pedro a muchos de nosotros también nos sucede lo mismo. No entendemos aún las cosas de Dios que nos enseña Jesús y no nos situamos todavía en el Plan de Dios  nos es difícil entender. 

Tú y yo, hermanos, tenemos la necesidad de despojarnos de todos esos criterios que nos enseña la gente y así, adoptar todas esas enseñanzas que nos regala Jesús escritas en los Evangelios, para que así, podamos precisar nuestra verdadera identidad con Él. 

No es posible seguir a Jesús de manera inconsciente y ligera. Tenemos que conocerlo cada vez más en profundidad recorriendo sus experiencias que nos permitan captar lo que Él encierra.

Pregúntate: ¿Quién es Jesús para mi?: De acuerdo a como lo hemos leído en los Evangelios es ese hombre ¡Quien no tira la toalla! Ese hombre coherente, fiel, que decide vivir según sus más profundas convicciones. 

Señor, Tu sabes cuántas veces sentimos la tentación de echarnos para atrás, de defendernos en lugar de defenderte; de seguir nuestras convicciones en lugar de las tuyas. Sé nuestra fuerza en las debilidades. Permítenos seguirte sin abandonarte en ningún momento. Y que seamos conscientes de que en esta lucha, la victoria pertenece a nuestro Dios.

 
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sábado, septiembre 14, 2024

"No olviden las acciones del Señor"...Salmo 78

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Sábado 14 de Septiembre del 2024.

Hoy celebra la Iglesia La Exaltación de la Santa Cruz una fiesta que honra la Cruz como el instrumento sagrado donde Jesús ofreció su vida por la salvación de la humanidad. 

El origen de esta celebración se inició en Jerusalén en el año 335 de la era actual para conmemorar la consagración de la Iglesia  del Santo Sepulcro tras haber sido descubierta la cruz por Santa Elena madre del Emperador Constantino y la ayuda del Obispo de Jerusalén, San Macario. Los fragmentos de la Santa Cruz se encuentran en Roma en la Iglesia de la Santa Cruz. 

En el Evangelio de hoy tomado de Jn 3, 13-17, San Juan nos presenta un trozo de la conversación que sostuvo Jesús con Nicodemo, un hombre fariseo muy importante en Israel, miembro del Sanedrín quien tenía un sentido excesivo y falso de su doctrina ortodoxa. Siempre vivía impresionado por los milagros de Jesús y que quiso escuchar la doctrina cautivante de Él.

Dice el texto del Evangelio que Jesús le dijo a Nicodemo: “Nadie ha subido al cielo, sino el que descendió del cielo, el Hijo del hombre que está en el cielo. De la misma manera que Moisés levantó en alto la serpiente en el desierto, también es necesario que el Hijo del hombre sea levantado en alto, para que todos los que creen en Él tengan Vida eterna. Sí, Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en Él no muera, sino que tenga Vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por Él”. Jn 3, 13-17.

Dentro del diálogo que sostenían, Jesús le expresa a Nicodemo: "No te maravilles por lo que te digo: Es preciso nacer de arriba" y con ello le quiso expresar que debía experimentar un cambio moral que era Nacer de nuevo, nacer a una nueva vida en Dios y eso, le causó extrañeza pues Jesús le pedía que  era necesaria la purificación de su alma. Él se anticipa a lo que debía soportar Morir en una Cruz, pero le llena de esperanza: Su Resurrección. 

Con estas palabras, Jesús le da un nuevo sentido a la Cruz para explicar que nuestros pesares y momentos difíciles diarios nos abren  el camino para recibir su gracia que alivia nuestras cargas: La cruz un camino para lograr la Salvación. 

Hermanos, miremos la cruz y descubramos en ella la grandeza del amor y la misericordia de Dios quien nos invita cada día a tener respuestas al seguimiento a Jesús que nos abre camino a la plenitud del gozo en la vida eterna. Me pregunto: ¿Por qué rehusamos a veces en seguir las huellas de Jesús? No podemos dejar de recordar que el amor de Jesús por nosotros convierte los sufrimientos y angustias en alegría. Resucitar es trascender a una vida nueva llena de esperanza. No le fallemos al Señor.

Señor, Tu, que por nuestro amor entregaste tu vida en la cruz, te pedimos acrecientes en nosotros el amor para que podamos asumir con prontitud de ánimo los sufrimientos de la vida.  Danos tu gracia para cargar nuestra cruz con amor y paciencia, contemplándote siempre a Ti, que vas mostrándonos el camino que debemos seguir.

 
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viernes, septiembre 13, 2024

"¡Qué deseables son tus moradas, Señor!"...Salmo 84.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Viernes 13 de Septiembre del 2024

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 6, 39-42, Jesús enseña a sus discípulos a ir más allá de lo que los otros hacen, y utilizando una parábola les enseña: "«¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo? Un discípulo no es superior a su maestro, pero, cuando termine su aprendizaje, será como su maestro. ¿Por qué ves la paja en el ojo de tu hermano y no adviertes la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: “Hermano, déjame sacarte la paja que llevas en el ojo”, cuando no adviertes la viga que llevas en el tuyo. !Hipócrita! Sácate primero la viga de tu ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano". Lc 6, 39-42.

Hermanos, muchos somos los que hemos tomado acciones inhumanas que nos avergüenzan frente a Dios. Si, hemos venido caminando desorientados en busca de la verdad y mal entendemos las cosas y deformadas con otros sentidos las damos a conocer a otros. 

Lo peor de todo esto, es que hacemos relevancia a la justicia, la paz y la moral con tanta ceguera que transmitimos cosas que son imposibles de practicar o defender y desorientamos también a otros hasta incluso, desatar enemistades.

Hoy Jesús nos está invitando a que cuándo busquemos apoyar o ayudar a otros, no lo hagamos sin bases claras  y a conciencia de la realidad, para así evitar caer en malas orientaciones que conlleven a otros a que tomen nuestros errores, defectos y pecados como base para realizar sus vidas y aspiraciones. 

Jesús desea que cuando nos acerquemos a otros en pos de ayudarles, lo hagamos con respeto, humildad y deseo de hacer el bien.

Jesús no niega el ejercicio de las críticas, antes por el contrario, las recomienda, pero, ojo: nos indica en qué condiciones las debemos hacer.  Si queremos juzgar a otros a conciencia, veámonos primero nuestros errores y no los comparemos con los que tienen las otras personas; más bien, comparémoslos con lo que Dios quiere de nosotros. 

Señor, ayúdanos a ver claro. Danos fuerza para cambiar. Perdona nuestra hipocresía. Ilumina nuestro entendimiento y corazón con la luz de tu Verdad y de tu Amor, para que nos hagas cada día más sensible al mal que hay en nosotros. Te damos gracias por tu compañía, por tus enseñanzas, por tu fuerza.

 
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jueves, septiembre 12, 2024

"Guíame, Señor, por el camino eterno"...Salmo 139

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Jueves 12 de Septiembre del 2024

El Evangelio de hoy tomado de Lc 6, 27-38 es la continuación del Evangelio de ayer en donde Jesús les propone tanto a sus discípulos y a toda la gente, lo que denominamos: El Sermón de la Montaña.

Como lo leemos en el texto, Jesús se dirige hoy a la multitud que lo escuchaba y les dice: "Amad a vuestros enemigos, haced el bien a los que os odian, bendecid a los que os maldicen, orad por los que os injurian. Al que te pegue en una mejilla, preséntale la otra; al que te quite la capa, déjale también la túnica. A quien te pide, dale; al que se lleve lo tuyo, no se lo reclames. Tratad a los demás como queréis que ellos os traten. Pues, si amáis sólo a los que os aman, ¿Qué mérito tenéis? ". Lc 6, 27-33.

Jesús invita a todos los que escuchamos sus Palabras a sacar lo mejor de nosotros mismos y ponernos en disposición de salida para llevar a todos los lugares del mundo, el amor y la misericordia que brinda Dios.

Él, nos invita a que nos amemos a nosotros mismos y a los demás, no a medias sino de corazón y con entrega. 

Esta es la novedad del Evangelio de hoy. Jesús nos muestra que no hay mérito en amar a quien nos ama, porque eso también lo hacen los pecadores. Los cristianos, sin embargo, estamos llamados a amar a nuestros enemigos. Hacer el bien y prestar sin esperar nada a cambio, sin intereses y la recompensa será grande. 

Hermanos, en este discurso Jesús nos invita a cambiar de raíz todos los esquemas que hemos venido construyendo durante nuestro tiempo de vida y a que nos abramos completamente a su Divina Voluntad. 

También nos pide a que amemos a Dios y tengamos compasión y misericordia con aquellos que la sociedad ha marginando.

Jesús también espera de nosotros que perdonemos a quienes nos ofenden u ofendemos pero, sin ninguna clase de venganza y busquemos compensar los sufrimientos con comprensión, lucidez, amor y compasión.

Señor, ayúdanos a amar a los enemigos, a hacer el bien a los que nos odian, como tú nos amas a nosotros, cuando no lo merecemos. Señor, enséñanos a bendecir a los que nos maldicen y a orar por los que nos injurian, como tú nos bendices y acompañas cuando nos alejamos de ti. Que la generosidad con la que tú nos tratas transforme nuestro egoísmo para tratar a los demás, no como merecen, sino como necesitan; no como ellos nos tratan, sino como tú nos tratas.

 
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miércoles, septiembre 11, 2024

"Escucha, hija, mira: inclina el oído"...Salmo 454

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Miércoles 11 de Septiembre del 2024

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 6, 20-26, Jesús les propone a sus discípulos una forma de una vida nueva y distinta que no esté atada a los bienes materiales, entonces les proclama Las Bienaventuranzas.

Dice el texto del Evangelio que:  "Jesús luego de seleccionar a sus  doce discípulos a quien llamó Apóstoles, bajó con ellos al llano y encontrándose con mucha gente, miró fijamente a sus discípulos  y les dijo: "¡Felices ustedes, los pobres, porque el Reino de Dios les pertenece! ¡Felices ustedes, los que ahora tienen hambre, porque serán saciados! ¡Felices ustedes, los que ahora lloran, porque reirán! ¡Felices ustedes, cuando los hombres los odien, los excluyan, los insulten y proscriban el nombre de ustedes, considerando os infames a causa del Hijo del hombre! ¡Alégrense y llénense de gozo en ese día, porque la recompensa de ustedes será grande en el cielo!" Lc 6, 20-24.

Hermanos, las Bienaventuranzas son un sentir que nos lleva a pensar que somos vulnerables ante Dios. Él desea que tú  y yo realicemos una vida dichosa y como sus discípulos seamos constructores de vida nueva en todos los lugares donde nos encontramos haciendo la voluntad de Dios: Dándolo a conocer como el Único Camino que nos conduce a su Reino

Estamos hoy invitados a rectificar el rumbo que le hemos dado a nuestras vidas y a que busquemos del Señor para con Él y sus enseñanzas hacer un mundo mejor donde todos podamos mirarnos  iguales.

Señor,  llega a nuestras vidas a santificarlas para que nuestro rostro refleje el de tu amado Jesús; que sea tu Santo Espíritu haciendo su obra transformadora en nuestro interior de tal manera que quite todo orgullo, soberbia, prepotencia, autosuficiencia, incredulidad; capacítanos para reconocernos vulnerables, débiles y necesitados de Ti, de tal manera que seamos acreedores al don de Dios, y su Reino sea una realidad en nuestra vida.

 
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martes, septiembre 10, 2024

"El Señor ama a su pueblo"...Salmo 149.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Martes 10 de Septiembre del 2024

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 6, 12-19 vemos a Jesús que sube por la noche a la montaña a orar después de vivir varias jornadas en la sinagoga. Al despuntar del nuevo día, hace una trascendental elección: Elige a doce de sus discípulos y los llama Apóstoles. 

Dice el texto del Evangelio que: "Jesús se retiró a una montaña para orar, y pasó toda la noche en oración con Dios. Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos y eligió a doce de ellos, a los que dio el nombre de Apóstoles:  Simón, a quien puso el sobrenombre de Pedro, Andrés, su hermano, Santiago, Juan, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago, hijo de Alfeo, Simón, llamado el Zelote, Judas, hijo de Santiago, y Judas Iscariote, que fue el traidor." Lc 6, 12-15.

Como lo leemos en el texto del Evangelio,  Jesús tuvo antes de su trascendental escogencia  de sus apóstoles un encuentro íntimo con su Padre-Dios y allí, seguramente realizó un profundo discernimiento para elegir a doce hombres de entre el número de quienes le seguían.

Es sorprendente este pasaje porque, normalmente pensamos que desde el principio, fueron escogidos como Apóstoles. Pero parece que no fue así. Eran discípulos que iban aprendiendo, detrás del maestro. Jesús iba comprobando cómo asimilaban su mensaje y cómo estaban comprendiendo su actuación. En un momento en este caminar, pidiendo ayuda a su Padre Dios, les nombra Apóstoles a algunos de sus seguidores, con nombre propio. Sabemos que Jesús ante decisiones importantes se mueve con la fuerza de la oración y con la luz recibida del Padre. Así, inicia la llamada, nombre por nombre, de aquellos que serán los anunciadores de su vida y misión. 

Esas doce personas eran gente del común, tenían virtudes y defectos como nosotros. Su elección no fue al azar ni por amistad. Él les pide que lo acompañen para formarlos bien y así, enviarlos a predicar la doctrina del Reino confiándoles poderes que demostrarán al mundo, la llegada del Mesías, el Salvador. 

¿Estamos siendo agradecidos con Dios por habernos elegidos y llamados al servicio de la misión apostólica de Darlo a Conocer como el Único y Verdadero Camino que nos conduce a Dios-Padre?

Hermanos, hoy Jesús nos regala una gran enseñanza: Tenemos que dedicarle tiempo a la oración. Ella la podemos realizar en ciertos momentos del día tomando como referencia  los textos del Evangelio para meditar de manera consciente y profunda lo que Dios nos quiere decir para realizar nuestra vida.

Preguntémonos: ¿Cómo estamos rezando nosotros?, ¿Qué tiempo le dedicamos a Dios?  Recordemos que la oración es un don que exige compromiso, continuidad y constancia por nuestra parte.

Jesús: Tú eres siempre una sorpresa, eres el amigo que se encuentra sin esperarlo. Y yo te he encontrado. No esperaba conocerte tan de cerca. Pero llegaste, como a la Samaritana, y me has dicho: "Dame de beber". Como a Zaqueo, elevaste los ojos hasta el árbol en que estaba, y me dijiste: "Baja, que quiero hospedarme en tu casa". Sabes que te necesito, y llegas sin que te llame. Permíteme acompañarte en el camino. Tú me conoces y sabes lo que quiero, lo mismo mis proyectos que mis debilidades. No puedo ocultarte nada, Jesús. Quisiera dejar de pensar en mí, y dedicarte todo mi tiempo.
 
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lunes, septiembre 09, 2024

"Señor, guíame con tu justicia"...Salmo 5.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Lunes 9 de Septiembre del 2024

Hoy celebra la Iglesia la fiesta de San Pedro Claver quien de manera abnegada se entregó a los negros y se declaró su defensor. Su nombre de nacimiento fue Pere Claver Corberó. Fue misionero y sacerdote de la congregación Jesuita. Nació el 26 de junio de 1580 en Verdú, Corona de Aragón, España y vivió en Cartagena de Indias donde dedicó parte de su vida. Sus Restos están depositados en la Iglesia (Santuario) que lleva su nombre en la Ciudad de Cartagena Colombia donde fue declarado su Patrón.

El Evangelio de hoy tomado de Lc 6, 6-11 nos presenta la curación que hace Jesús a un hombre que tenia la mano derecha paralizada. Este hecho fue realizado en la Sinagoga de Cafarnaún donde los Letrados y los Fariseos lo espiaban para ver si sanaba en sábado y así tener un motivo para acusarlo.

Dice el texto del Evangelio que: "Un sábado, Jesús entró en la sinagoga y comenzó a enseñar. Había allí un hombre que tenía la mano derecha paralizada. Los escribas y los fariseos observaban atentamente a Jesús para ver si sanaba en sábado, porque querían encontrar algo de qué acusarlo. Pero Jesús, conociendo sus intenciones, dijo al hombre que tenía la mano paralizada: “Levántate y quédate de pie delante de todos”. Él se levantó y permaneció de pie. Luego les dijo: “Yo les pregunto: ¿Está permitido en sábado, hacer el bien o el mal, salvar una vida o perderla?” Y dirigiendo una mirada a todos, dijo al hombre: “Extiende tu mano”. Él la extendió y su mano quedó sana. Lc 6, 6-10.

Miremos algo muy importante: Jesús es criticado porque sana de las enfermedades a los hombres los días sábados. Un día en que las normas religiosas no permitían que los hombres actuarán bajo ninguna circunstancia y mucho menos en relación al mandato del amor que era la esencia de la ley.

Jesús cuestiona entonces a la asamblea y les dice: "Es lícito o no curar en sábado?". Los Letrados y los Fariseos se sienten provocados y excitados a la agresividad, pero Jesús   les enseña que antes que todo era la dignidad de las personas y cura al hombre que tenía paralizada su mano derecha, una mano importante para desarrollar cualquier actividad. 

Hermanos, Jesús siempre se inclina hacia el bien, pues su bondad es infinita y devuelve la vida y la dignidad de los paralizados y enfermos. Hoy vemos que hay muchas enfermedades que nos paralizan el espíritu y estas nos impiden actuar de manera positiva, pues nos mantiene inactivos, pasivos y despreocupados y sin ningún interés espiritual. 

¿Será que tú y yo estamos siendo paralizados y con las manos atrofiadas para actuar en beneficio de los más necesitados sin importar día ni hora? Recordemos que Jesús nos pide dar amor y misericordia a todos por igual. 

Señor, Tú eres fuente de la auténtica libertad, aquella que nos puede llevar a optar siempre por el mejor bien. Hoy te pedimos que nos concedas la gracia de saber darte siempre el lugar que te corresponde, pues Tú eres nuestro Maestro y mejor amigo porque por Amor incondicional has dado tu vida por nosotros, ¡ayúdanos! a serte siempre fiel y corresponder con fidelidad a tu amor.

 
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domingo, septiembre 08, 2024

"Alaba, alma mía, al Señor"...Salmo 146.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Domingo 8 de Septiembre del 2024

Hoy la Iglesia celebra dos acontecimientos: La Pascua Eterna de Francisco María de la Cruz Jordán y La Natividad de la Virgen María. 

Francisco María de la Cruz Jordán,  falleció en Tafers (Suiza). Él fundó La Sociedad del Divino Salvador conocida como La Familia Salvatoriana. Fue Beatificado en la Basílica de San Juan de Letrán en Roma por el Cardenal Angelo De Donatis Vicario de SS. Francisco para la Diócesis de Roma el 15 de mayo del año 2021.

La Natividad de la Virgen María, es una de las trece fiestas marianas de la Iglesia Católica. Los padres de María se llamaban Joaquín y Analizaron. Ana era una mujer

estéril y se dice que un ángel del Señor se presentó ante ella y le dijo que concebiría y daría luz. La historia sobre su nacimiento no se encuentra escrita en las Sagradas Escrituras, pero la Iglesia celebra su cumpleaños el 8 de Septiembre, nueve meses de la Solemnidad de la Inmaculada Concepción.

Hoy el Evangelio tomado de Mc 7, 31-37 nos narra la curación que realiza Jesús de un hombre extranjero que era sordomudo. Este milagro fue realizado en territorio pagano y lejos de la multitud.

Dice el texto del Evangelio que Jesús volvía de la región de Tiro, pasó por Sidón y fue hacia el mar de Galilea, atravesando el territorio de la Decápolis. Entonces le presentaron a un sordomudo y le pidieron que le impusiera las manos. Jesús lo separó de la multitud y, llevándolo aparte, le puso los dedos en las orejas y con su saliva le tocó la lengua. Después, levantando los ojos al cielo, suspiró y le dijo: "Efatá”, que significa: “Ábrete”. Y enseguida se abrieron sus oídos, se le soltó la lengua y comenzó a hablar normalmente. Jesús les mandó insistentemente que no dijeran nada a nadie, pero cuanto más insistía, ellos más lo proclamaban y, en el colmo de la admiración, decían: “Todo lo ha hecho bien: hace oír a los sordos y hablar a los mudos”. Mc 7, 31-37. 

Como lo leemos en el texto, Jesús se apartó con el sordomudo de la muchedumbre que le acompañaba y ya aparte, metió sus dedos en los oídos del hombre sordo y escupiendo sobre sus dedos le tocó la lengua.

Hermanos,  Jesús sana a quienes escuchan sus palabras y toman con decisión y fe un camino nuevo reconociéndose como el Salvador.  Cuanto nos hace falta hoy  pedirle al Señor que nos abra la mente y el corazón para poder comprometernos en su seguimiento y actuar con causas justas por los más necesitados. 

Este Evangelio de hoy es clave para reafirmar nuestra misión de acuerdo a lo que nos ha pedido Jesús: "Vayan y díganle a los ciegos que vean, que los sordos oigan y que ya ha llegado la liberación a los cautivos". Recordemos que Jesús nos ha enviado a curar a todos los hombres enfermos y ha darle la paz verdadera. 

Señor, perdona nuestra falta de escucha. Hay mucha gente sorda por ahí a los cuales tenemos que descubrirles la sordera; a otros, hay que ayudarles a superarla. Señor, es tan importante escuchar a las personas y a Dios y es tan triste estar incomunicado. Permite que caigamos en conciencia y abramos nuestros sentidos para oír tu voz que nos invita a sanar nuestra falta de fe y así, podamos salir hacia otros para decirle que contigo a tu lado todo es posible.

 
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sábado, septiembre 07, 2024

"Cerca está el Señor de los que lo invocan"...Salmo 145

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Sábado 7 de Septiembre del 2024

En el Evangelio tomado de Lc 6, 1-5, Jesús le habla a los líderes religiosos a cerca de los legalismos y rituales porque los habían convertido en ley suprema y absoluta para el pueblo judío y les hace ver que la meta de toda actividad religiosa ha de estar dirigida a la Salvación del hombre. 

Una vez mas, el Evangelio de hoy nos presenta la postura de Jesús en el punto concreto del sábado. Como sabemos la ley judía daba mucha importancia al sábado, era el día de descanso para el Señor, y muy pocas cosas se podían hacer ese día con la idea de homenajear al Señor de manera más explícita. Para El, lo importante sea en sábado o en otro día de la semana es favorecer y hacer el bien a cualquier persona humana. Eso es lo que está permitido y es donde hay que poner el acento en el actuar humano. No hay nada, ni la ley del sábado, que pueda ir en contra de hacer algo que favorezca a cualquier persona humana, sea curando a enfermos, sea alimentándose de las espigas arrancadas en el campo. El sábado está para servir al hombre y no el hombre para servir al sábado.

Dice el texto del Evangelio que: "Un sábado, en que Jesús atravesaba unos sembrados, sus discípulos arrancaban espigas y, frotándolas entre las manos, las comían. Algunos fariseos les dijeron: “¿Por qué ustedes hacen lo que no está permitido en sábado?” Jesús les respondió: “¿Ni siquiera han leído lo que hizo David cuando él y sus compañeros tuvieron hambre, cómo entró en la Casa de Dios y, tomando los panes de la ofrenda, que sólo pueden comer los sacerdotes, comió él y dio de comer a sus compañeros?” Después les dijo: “El Hijo del hombre es dueño del sábado”. Lc 6, 1-5

Y es que constantemente Jesús era observado por los judíos quienes creían que Él estaba siempre contradiciendo las costumbres religiosas. 

En un día de descanso como era costumbre (sábado), se le impedía a los campesinos trabajar y recoger espigas, como también, a reunirse para escuchar y meditar la Palabra de Dios, a estar juntos y compartir la fe, problemas y enseñanzas. Si, actuaban como si fuesen esclavos. 

Jesús, por el contrario no se muestra como un esclavo obediente, sino como el Señor del Sábado y eso a los escribas y fariseos les molestaba ya que consideraban que la ley debía estar por encima del hombre.

Fue entonces cuando Jesús les aclara que el Hijo del Hombre está sobre la Ley y es el dueño  de la ley; porque Dios ha creado todas las cosas para los hombres y el hombre para Dios y les dice: "¡El Hijo del Hombre  es el Señor del sábado!" porque vive la intimidad con Dios no de afuera sino de adentro para afuera.

Este Evangelio hermanos nos invita a cultivar el vínculo afectuosos y amoroso con Dios y a estar atento a la escucha de su Palabra.

Señor, Tú nos ofreces tu palabra y tu ley, para compartir con nosotros tu sabiduría, para que conducirnos por el camino de bien, para buscar la concordia y la paz, para ayudarnos a encontrarnos contigo. No permitas que utilicemos la ley para condenar, para someter a las personas más débiles, para defender los intereses de los poderosos, para justificar injusticias y atropellos, para convertirla en un ídolo sin corazón. Señor, danos sabiduría para comprender tu ley, confianza para aceptarla como camino de vida y acierto para mostrarla en positivo a los demás.

 
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viernes, septiembre 06, 2024

"El Señor es quien salva a los justos"...Salmo 37

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Viernes 6 de Septiembre del 2024

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 5, 33-39 nos narra a cerca de un conflicto que se generó entre las autoridades religiosas y Jesús en torno al ayuno, pues éste era un elemento esencial de la vida piadosa de los judíos.

Dice el texto del Evangelio que: "Los escribas y los fariseos dijeron a Jesús: “Los discípulos de Juan ayunan frecuentemente y hacen oración, lo mismo que los discípulos de los fariseos; en cambio, los tuyos comen y beben”. Jesús les contestó: “¿Ustedes pretenden hacer ayunar a los amigos del esposo mientras él está con ellos? Llegará el momento en que el esposo les será quitado; entonces tendrán que ayunar.” Lc 5, 33-35.

Los fariseos no comprenden a Jesús. Su Evangelio es el vino bueno, la pieza nueva. Los corazones de los fariseos son los odres viejos, el manto viejo. Para acoger a Jesús tenemos que cambiar el corazón, la forma de pensar, nuestro estilo de vida. Si no nos vamos convirtiendo a la Palabra de Jesús, nunca descubriremos su novedad. 

El ayuno y la oración eran elementos esenciales en la vida piadosa en los tiempos de Jesús. Estas fueron acogidas y puestas en práctica por los fariseos de acuerdo a las enseñanzas que recibieron de Juan Bautista. 

Los Escribas y los fariseos critican a Jesús al ver que sus discípulos y amigos pasan por alto estas costumbres y Él, se muestra permisivo. Y entonces, les hace esta comparación: "Nadie corta un pedazo de un vestido nuevo para remendar uno viejo, porque se romperá el nuevo, y el pedazo sacado a éste no quedará bien en el vestido viejo" Lc 5, 36. Con estas palabras les da a entender que Él ha venido a traer una vida nueva cargada de alegría y para poderla obtener se requiere de hombres nuevos con nueva mentalidad, criterios nuevos para que vean y vivan de manera distinta y sean testimonios de vida a los que convivan junto a ellos. 

Para comprender a Jesús hay que nacer de nuevo; mejor dicho, tenemos que dejar que Dios nos dé a luz de nuevo. Preguntémonos: ¿Qué Mensaje podrías sacar  de este Evangelio que sirva para mejorar tu vida y de la comunidad con quien convives?

Señor, que aprendamos a olvidarnos de nosotros mismos, para así, escucharte y entender Tu Voluntad. El ayuno no es sólo algo externo como lo veían los fariseos. El ayuno va al interior del hombre. Consiste en cumplir lo que Tú nos pides y amarte con todo el corazón. Tú eres novedad y haces nuevas a las personas que, con confianza, se dejan tocar por Ti.
 
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jueves, septiembre 05, 2024

"Del Señor es la tierra y cuanto la llena"...Salmo 24.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Jueves 5 de Septiembre del 2024

Hoy la Iglesia celebra la Fiesta de la Beata María de los Apóstoles y la Familia Salvatoriana (Religiosos, Religiosas y Laicos) le ofrece gratitud al Señor por su vida y obra. Ella, fue la primera Salvatoriana que inició la rama femenina de la Sociedad fundada por el Beato Francisco María de la Cruz Jordán. Fue una mujer de la nobleza del norte de Alemania que vivió la búsqueda de su vocación hasta encontrarla plenamente en el carisma y la espiritualidad que el Beato Francisco Jordán legó a hombres y mujeres que se vieron cautivados por su espiritualidad y misión.

El Evangelio de hoy tomado de Lc 5, 1-11 nos presenta el episodio sorprendente e inesperado sucedido en el mar de Genesaret  o también llamado el mar de Galilea: La Pesca Milagrosa.

Este hecho así lo narra el texto del Evangelio: "Una multitud se amontonaba alrededor de Jesús para escuchar la Palabra de Dios, y él estaba de pie a la orilla del lago de Genesaret. Desde allí vio dos barcas junto a la orilla del lago; los pescadores habían bajado y estaban limpiando las redes. Jesús subió a una de las barcas, que era de Simón, y le pidió que se apartara un poco de la orilla; después se sentó, y enseñaba a la multitud desde la barca. Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: "Navega mar adentro, y echen las redes”. Simón le respondió: “Maestro, hemos trabajado la noche entera y no hemos sacado nada, pero si tú lo dices, echaré las redes”. Así lo hicieron, y sacaron tal cantidad de peces, que las redes estaban a punto de romperse".  Lc 5, 1-6.

La gente seguía a Jesús porque estaban ansiosas de escucharle sus Palabras y también porque tenían hambre y sed de justicia. 

Era tanta la gente que llegaban a donde Él estaba que lo rodeaban y no lo dejaban moverse libremente. Y es que las Palabras que decía Jesús seducían, encantaban y cautivaba.

Hermanos, a mi parecer nosotros estamos perdiendo cada vez más la capacidad de transmitir la fe porque nos está faltando esfuerzo e iniciativa para leer con insistencia la Palabra, formarnos y acrecentar con fuerza la fe. Lo importante en estos momentos no son las doctrinas sino la vida y la persona de Jesús, para así, entrar en un contacto permanente con Él y despertar de ese adormecimiento con ardor y voluntad a fin de transmitir por todos los lugares, su luz.

Miren: Aunque el Evangelio de hoy nos narra una historia que parece  novelada, el trasfondo de todo esto es comprender que cuando ponemos nuestra confianza en el Señor, Él no nos defrauda nunca. Por lo tanto, no debemos esperar únicamente que nos consiga bienes materiales, como fue la abundancia de peces, hay que confiar que Dios, encarnado en Jesús de Nazaret, nos acompañará siempre y nos facilitará el camino que nos impone su seguimiento. No debemos esperar hechos extraordinarios siempre, debemos encontrar la presencia de Dios en las cosas pequeñas e insignificantes, esforcémonos en buscar esa presencia de Dios abriendo nuestros corazones y nuestra mente a su Palabra para comprender que cuando ponemos nuestra confianza en el Señor, Él no nos defrauda nunca.

Dios y Señor nuestro, te alabamos y bendecimos en este maravilloso día que nos regalas para ser tus discípulos, para caminar junto a ti, sin miedos y temores, con la seguridad que vas con nosotros en la opción de seguirte, en la responsabilidad de llevar tu mensaje de amor, en la alegría de despojarnos de nuestros propios sueños para asumir tu misión: la Salvación.

 
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miércoles, septiembre 04, 2024

"Dichoso el pueblo que el Señor se escogió como heredad"...Salmo 33

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Miércoles 4 de Septiembre del 2024

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 4, 38-44 podemos apreciar que Jesús se había dedicado a curar enfermos y personas poseídas por los espíritus malignos y lo hace conmovido por el dolor y la desesperación que muchos de ellos expresaban.

Así lo describe el texto del Evangelio: "Al salir de la sinagoga, Jesús entró en la casa de Simón. La suegra de Simón tenía mucha fiebre, y le pidieron que hiciera algo por ella. Inclinándose sobre ella, Jesús increpó a la fiebre y ésta desapareció. En seguida, ella se levantó y se puso a servirlos. Al atardecer, todos los que tenían enfermos afectados de diversas dolencias se los llevaron, y Él, imponiendo las manos sobre cada uno de ellos, los sanaba. De muchos salían demonios, gritando: “¡Tú eres el Hijo de Dios!” Pero Él los increpaba y no los dejaba hablar, porque ellos sabían que era el Mesías”*. Lc 4, 38-41.

La curación de los enfermos es uno de los signos que más se refleja en el ministerio de Jesús. La sanación es un signo de salvación y en ella está impresa la señal de Dios que quiere restaurar o restablecer la dignidad de las personas; y esa restauración debe estar acompañada al servicio de los demás. La curación de la suegra de Simón - Pedro nos lo pone en evidencia. 

Miren: Jesús no se hacía ilusiones. Él sabía muy bien porque la gente lo buscaba y querían retenerlo para que no se fuera a otras partes. Él lo que quería era humanizar y liberar a quienes se encontraban distanciados y despreciados de la sociedad para que tuviesen una vida digna y fueran partícipes de la Buena Noticia del Reino de Dios. 

Jesús no es exclusivo de ningún grupo y todos tenemos el derecho de recibirlo, Él es más que un ídolo y no debemos buscarlo esperando milagros. A Él hay que dejarlo actuar en nuestras vidas, pero... debemos mostrarle amor y acciones principalmente hacia nuestros hermanos más necesitados. 

Señor, no nos cansaremos de repetirlo y hoy te damos gracias por sostenernos en esta ilusión de seguirte y serte fiel: Te pedimos un corazón semejante al tuyo, que sepa estimar las cosas con tu percepción, que sepa apreciar las situaciones con tu espíritu, mirar a las personas con tu perspectiva. Danos un corazón que antes se canse de vivir para sí mismo, que se entregue a los demás. Danos un corazón sencillo, que no entienda de egoísmos y de tiempos,  y de eso, como «yo quisiera que», «me gustaría más», «preferiría mejor»… Danos Señor, un corazón cuya única ilusión sea amar, sea dar, entregarse y dar testimonio verdadero de tu Amor. 

 
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