"Te doy gracias, Señor, porque me escuchaste"...Salmo 118.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Sobado 6 de Abril del 2024

INTRODUCCION:

Bien distinta la postura de los “sumos sacerdotes y ancianos” y la de los apósteles, después de la resurrección de Jesús. Los primeros buscaban que no se volviese a hablar de Jesús, de su mensaje y de su resurrección. Querían que Jesús muriese para siempre en el corazón de los hombres. En cambio, los apóstoles no hacen más que proclamar a Jesús y toda su buena noticia, insistiendo en su resurrección. Ante la postura prohibicionista de las autoridades judías, la respuesta de los apóstoles es bien clara: “Nosotros no podemos menos de contar lo que hemos visto y oído”. También nosotros, cristianos de 2024, podemos dar esa misma respuesta. Y la razón es bien clara: tenemos que hablar de Jesús, de su vida, muerte y resurrección y de todas sus promesas, porque ahí hemos encontrado la mejor manera de vivir nuestra vida con sentido, con ilusión, con alegría. No es posible que nos callemos. Jesús les había enseñado, empezando porque él además de ser hombre es Dios, que podían comunicar a los hombres que el era el Hijo de Dios y que había venido para que todos los hombres disfrutasen de la vida en abundancia. Y les pide: “Id al mundo entero y predicad el Evangelio a toda la creación”.

Así nos lo presenta el texto del Evangelio: "Jesús, que había resucitado a la mañana del primer día de la semana, se apareció primero a María Magdalena, aquella de quien había echado siete demonios. Ella fue a contarlo a los que siempre lo habían acompañado, que estaban afligidos y lloraban, después, se mostró con otro aspecto a dos de ellos, que iban caminando hacia un poblado y tampoco les creyeron. En seguida, se apareció a los Once, mientras estaban comiendo, y les reprochó su incredulidad y su obstinación porque no habían creído a quienes lo habían visto resucitado. Entonces les dijo: "Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación." Mc 16, 9-15.

Cómo es de anotar, en el contexto cultural de la época el testimonio de una mujer no se consideraba confiable, por lo tanto, este hecho de que Jesús se aparezca primero a María Magdalena y que ella sea la primera en dar testimonio de su resurrección es un gesto para los cristianos  muy significativo, de reconocimiento y elevación de la dignidad y el valor de la mujer.

También en el Evangelio se narra cómo Jesús se aparece en diferentes ocasiones a sus seguidores, quienes al principio dudan y no creen en los testimonios hasta que lo ven por sí mismos. Esto nos habla de la dureza de corazón y de los desafíos de fe a los que todos nos enfrentamos. 

Hermanos, la incredulidad de los discípulos no detiene el plan de Dios, sino que más bien sirve como un contraste para resaltar la magnitud del milagro de la Resurrección. 

Y es que la resurrección de Jesús es el sello de su autoridad divina y el fundamento de la misión cristiana; Él nos da este mandato: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”. Por lo tanto mis queridos hermanos es el momento de reflexionar sobre nuestra Fé y cómo respondemos al testimonio de su Resurrección. 

Jesús hoy nos llama a la misión de compartir este mensaje transformador con todo el mundo, más allá de nuestras inseguridades y temores. 

Le damos gracias a Dios por su compañía, por sus enseñanzas, por su fuerza...Y le pedimos que nos ayude a vivir de acuerdo con el Evangelio y dar de El testimonios de vida.