sábado, octubre 07, 2023

"El poderoso ha hecho obras grandes en mi: su nombre es santo"...Sal Lc 1. 46b-55.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Sábado 7 de Octubre del 2023

Hoy se celebra en la Iglesia la advocación de la Bienaventurada Virgen María del Santísimo Rosario patrona de los predicadores, de Colombia y la Unidad Militar de Emergencias de España. 

Según la tradición la Virgen María se le apareció a Santo Domingo de Guzmán en el año 1208 en una capilla del monasterio de Prouilhe (Francia) con un Rosario en las manos, le enseñó a rezarlo y se lo entregó para que lo promoviera. Con el tiempo este rezo se fue difundiendo por el mundo para contemplar los misterios de Cristo bajo el amparo de María. Su fiesta se celebra los 7 de octubre de cada año. 

El "hágase" de María transforma su humilde ser en la Casa de Dios, y a ella misma, en el Tabernáculo del Hijo de Dios: Jesús. Bastó decirle al Ángel Gabriel un "Aquí estoy", una señal de disponibilidad que se confirma en ella atreves de  la acción del Espíritu Santo. Y Dios entró en la historia aceptando hacerse historia en la vida de los que como María dijeron y seguirán diciendo "aquí estoy". María: confió y se  encomendó a Dios, segura de que en Él nada es imposible. Dios no teme el tiempo del desconcierto, de la reflexión, de la comprensión: Dios no obliga a la libertad, sino que educa a la libertad, para que cada uno pueda decir su “Aquí estoy”.

El Evangelio de hoy tomado de Lc 1, 26-38 nos relata el encuentro de Ángel Gabriel con María, una mujer virgen desposada con un varón que se llamaba José de la casa de David.

Dice el texto del Evangelio que: "El Ángel entró en su casa y la saludó, diciéndole: "Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo". Al oír estas palabras, ella quedó desconcertada y se preguntaba qué podía significar ese saludo. Pero el Ángel le dijo: “No temas, María, porque Dios te ha favorecido. Concebirás y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús; Él será grande y será llamado Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin”. María dijo al Ángel: “¿Cómo puede ser eso, si yo no tengo relación con ningún hombre?” El Ángel le respondió: “El Espíritu Santo descenderá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso el niño será Santo y será llamado Hijo de Dios. También tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar de su vejez, y la que era considerada estéril, ya se encuentra en su sexto mes, porque no hay nada imposible para Dios”. María dijo entonces: “Yo soy la servidora del Señor, que se haga en mí según tu Palabra”. Y el Ángel se alejó". Lc 1, 26-38.

Miremos algo muy importante para nosotros hoy: El SI de María fue libre, consciente y sin ninguna clase de presión. Fue una expresión de su absoluta e ilimitada confianza en Dios.

María muestra su fe y gran humildad y acepta sin condiciones la voluntad de Dios para convertirse en la madre del Salvador. Ella, sin entender completamente lo que ello implica, se muestra  obediente a Dios y acepta su voluntad.

Hermanos, Dios también se revela y hace sentir su presencia con suma sencillez sobre todo entre la pobreza y la miseria de muchas personas.

Hoy también el Arcángel Gabriel resuena en el corazón de muchos con su fuerza y dice: "No temas, porque has hallado la gracia de Dios" y ello nos quiere decir que Jesús quiere encarnarse en nosotros para  construir entre nosotros espacios fraternos y vivificadores de la confianza absoluta en Dios. 

Que la fuerza de la Palabra de Dios rompa en nosotros todas las tinieblas y se nos abran los caminos de la esperanza para experimentar al Único y Verdadero Dios. 

Señor, así como María supo acoger el anuncio del ángel, permite que sepamos escuchar y aceptar lo que hoy quieres decirnos en este Evangelio, porque nuestro anhelo es que la verdad de este, impregne nuestro modo de ver, pensar y de actuar.
 
posted by Laureano García Muentes at 5:33 a.m. | Permalink |


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