"Acuérdate de mi, Señor, por amor a tu pueblo"...Salmo 106.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Lunes 31 de Julio del 2023

Nosotros, ciudadanos del siglo XXI, vivimos en una sociedad donde predominan las nuevas tecnologías. Jesús vivió en un mundo casi exclusivamente agrícola y muchos de sus ejemplos y parábolas los coge de ese medio. De haber venido en nuestra época, seguro que se apoyaría en lo tecnológico para dar a conocer su propuesta y explicarnos el reino de Dios y su deseada evolución; por ello, echa mano de un diminuto grano de mostaza y de la manera cómo va creciendo hasta hacerse un gran arbusto. Y así lo hace para indicarnos que esa es la manera en que Dios debe evolucionar e ir creciendo en nuestro corazón. Desear y dejarle, que reine en nuestros pensamientos, en nuestros sentimientos, en todas nuestras reacciones ante las distintas circunstancias de la vida ha de ser nuestro compromiso. 

 Con esta parábola, Jesús nos invita a descubrir la forma como se inicia en el  hombre la presencia del Reino de Dios, como también su crecimiento oculto y la grandeza y multiplicidad de sus frutos a pesar de su pequeñez. Y miren, Dios planta su semilla en cada uno de nosotros y esta, llena de vida de manera silenciosa se va fecundando.

Hoy estás parábolas nos alientan a que vivamos con entrega y perseverancia en la misión que Jesús nos a entregado para con Él, construir el Reino de Dios en el mundo. 

Hermanos, una de las cosas que nos hace mucho daño es el triunfalismo, las ganas de sobresalir ante los demás y querer tener un poder. Estas parábolas de hoy nos dejan muy claro cuál es la tarea que tenemos que realizar los que seguimos a Jesús. Nos equivocamos cuando pensamos que nuestra religión hay que hacerla poderosa sino ponernos al servicio de Dios para continuar su proyecto humanizador sembrando nuestras pequeñas semillas en terrenos fértiles y que sean fermentos para la sociedad. No olvidemos que Jesús está siempre a nuestro lado y nos invita a promover la solidaridad, el deseo de verdad y justicia.