"El poderoso ha hecho obras grandes en mi: Su nombre es Santo"...Salmo Lc 1.

Jueves, 7 de Octubre del 2021

María, un modelo a seguir para estar siempre disponible a hacer vivencial el discipulado a su Hijo Jesucristo; así también, es nuestro consuelo en medio de las tristezas y desesperanzas, ya que nos ayuda a  no decaer un solo instante y confiar mas, en la Misericordia de Dios, quien nos dice como lo dijo a través  del Ángel Gabriel a María: "¡¡¡ NO TEMAS!!!".

Hoy celebramos como Iglesia Universal la fiesta de la Virgen del Rosario, fiesta instituida por el Papa Pio V; y es una invitación para todos los cristianos para que meditemos los misterios de Cristo Jesús en compañía de la Santísima Virgen (desde su encarnación, su vida, pasión,  muerte y resurrección).

El Evangelio de de hoy, tomado de Lc 1,26-38, se convierte para todos nosotros en un acto de Fe; y tiene como episodio central el encuentro de María, la joven mujer, con el Ángel Gabriel en Galilea de Nazaret.

Así, se narra: "Al sexto mes envió Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. Y, entrando, le dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.» Ella se conturbó por estas palabras y se preguntaba qué significaría aquel saludo. El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo a quien pondrás por nombre Jesús. Él será grande, se le llamará Hijo del Altísimo y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin.» María respondió al ángel: «¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón?» El ángel le respondió: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y se le llamará Hijo de Dios...Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» Y el ángel, dejándola, se fue"

En María hay una absoluta disponibilidad frente a la invitación que fue hecha por Dios a través del Ángel Gabriel y confía en la grandeza de su amor haciéndose obediente.

Que gran ejemplo de quien es hoy nuestra madre celestial. Un modelo a seguir como el estar siempre disponible a hacer vivencial el discipulado como también, para que en medio de las tristezas, desesperanzas no decaigamos un solo instante y confiemos en la Misericordia de Dios, quien nos dice como lo dijo el Ángel Gabriel a María: "¡¡¡ NO TEMAS!!!".

Así como María, dejémonos guiar por la fe y con la absoluta confianza en Dios y creamos que lo que es imposible y pesado para nosotros, se volverá frágil y liviano para cargarlo y llegar a la meta que soñamos. 

Sepamos esperar y apegados a la oración nos unamos a Dios, diciéndole: Señor, aquí estamos hoy como tus esclavos, hágase tú Voluntad en nosotros

“Señor Jesús, nos impresiona tu seguridad a la hora de orar al Padre. Danos tu Espíritu para que también en nosotros prevalezca la confianza plena y total en el amor de Dios-Padre”.