"El Señor es compasivo y misericordioso "...Salmo 102.
REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY
Lunes 28 de Junio del 2021
Jesús no engaña. Quien
quiera seguirlo tendrá que aprender a entregar la vida y a caminar sin casa ni
techo fijo.
El Evangelio de hoy tomado de Mt 8, 18-22 nos muestra lo que significa la radicalidad a la llamada que conlleva al seguimiento de Jesús.
Miremos el texto del Evangelio: Él le pone condiciones muy severas al letrado que se le acerca a decirle: " Maestro, te seguiré adonde vayas" como también al otro discípulo que le dijo: " Señor, déjame primero ir a enterrar a mi padre" Mt 8, 19, 21.
Observemos: Jesús no los rechaza de plano, sino que les hace entender que cuando uno se dona a algo, lo ha de hacer de manera integra y no incierta o parcial. Por eso al último le dijo muy claro: " Sígueme y deja que los muertos entierren a sus muertos " Mt 8, 22.
Él nos está invitando hoy a pasar a la otra orilla. Pero su llamado es exigente. Él requiere de nosotros: Renuncia.
Si, renunciar a lo que consideramos más importante para nosotros.
Él hoy a ti y a mi nos dice: "Quien pone la mano en el arado y vuelve la vista atrás no es apto para el Reino de los Cielos" Lc 9, 62. Por ello, quien se dispone seguir a Jesús ha de estar dispuesto a cargar la cruz aunque sea dolorosa e injusta, pues saberla llevar, nos dará firmeza para realizar una vida más auténtica y eterna.
Dedica varias horas a caminar. Aprende
lo que en el camino Jesús te enseñe. Dile: Juntos andemos, Señor. Por donde Tú
vayas, iré yo.