"Señor, tu has sido nuestro refugio de generación en generación"..."Antes que naciesen los montes o fueran engendrado el orbe de la tierra, desde siempre y por siempre tú eres Dios "...Salmo 89.

Sábado 13 de Febrero del 2021

JESUS NOS INVITA A SER SOLIDARIOS Y GENEROSOS, ASI VAMOS SEMBRANDO LA SEMILLA DEL REINO DE DIOS EN TODAS PARTES.

El Evangelio de hoy tomado de Mc 8, 1-10, nos presenta el relato del milagro de la multiplicación de los panes y peces.

Como lo podemos percibir en el texto del Evangelio, Jesús no se desentiende de la gente que lo está siguiendo, antes por el contrario, ve las necesidades que tienen y siente compasión por ellos. Él las hace suya y busca la solución.

No muestra una compasión emocional como esa que nosotros a veces sentimos hacia los demás y que, creemos que con ella, es suficiente y las evadimos silenciosamente.

Veámonos frente a frente en ese entorno y pensemos un momento sobre la forma como actuamos.

¿Cuándo vemos a familias (madre y niños) deambulando por las calles de nuestro barrio o de los pueblos y ciudades buscando de entre las canecas de la basura algo para comer; cuando algunos de estos, tocan las puertas de nuestras casa para pedirnos una ayuda, ¿Cómo actuamos?, ¿los rechazamos, o simplemente sentimos una compasión superficial y nos quedamos cortos  exclamando: ¡ Pobrecitos!, ¡hoy no tengo nada!, ¡en otra ocasión!?.

Pues bien, hoy Jesús nos pide echar mano en buscar de estas situaciones, soluciones eficaces que sean frutos del amor. 

Él, nos pide a que actuemos con sencillez y ternura  aportando un grano de arena para lograr en algo, el bienestar de los que necesitan de nosotros. 

Si, es sentirse en el cuerpo del que se acerca y así, mirarnos en su tragedia, en su hambre y su angustia por conseguir un pedazo de pan para saciar su hambre. 

Jesús nos pregunta hoy como lo hizo a sus discípulos: ¿"Cuantos panes tenemos, cuantos tienen para ofrecer?" 

La solidaridad y el dar con generosidad es más que suficiente. Lo demás se dará  por añadidura. Con nuestras buenas acciones, se está sembrando el Reino de Dios en la humanidad y con él, se expande el amor, la justicia, la solidaridad.

Estamos pues hoy invitados a compartir y repartir; como también, a recoger lo que a ellos les sobra.

Oremos:

Señor, ayúdanos a comprender la grandeza de tu amor. Alimenta nuestras almas que sienten hambre y sed de ti.

SEAMOS SIMBOLOS DEL AMOR Y LAMISERICORDIA DE DIOS. ACOJAMOS A LOS NECESITADOS DEL AMOR Y AYUDEMOLES A ENCONTRAR EL VERDADERO CAMINO.