lunes, julio 13, 2020
REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY

Lunes 13 de Julio del 2020

JESÚS NOS INVITA A SEMBRAR LA PAZ, LA JUSTICIA, LA SOLIDARIDAD Y LA RECONCILIACIÓN SIENDO COHERENTES A SU PROPUESTA DE AMOR.


"Al que sigue el buen camino le haré ver la salvación de Dios"..." No te reprocho tus sacrificios, pues siempre están tus holocaustos ante mi. Pero no aceptaré un becerro de tu casa, ni un cabrito de tu rebaño".
..Salmo 49.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 10,33-11,1, vemos a Jesús una vez más dándoles instrucciones muy claras a los discípulos a cerca de lo que significa sus propuestas de amor y paz para la humanidad.

Jesús les dice: " No piensen que he venido a traer la paz sobre la tierra. No vine a traer paz, sino espada. Vine a enemistar a un hombre con su padre, a la hija con su madre, a la nuera con la suegra; y así el hombre tendrá por enemigos a los de su propia casa" Mt 10, 34-36.

"He venido a traer división" Mt 10,35. Ello, no significa que Jesús desea crear el caos dividiendo a los hombres entre sí, no. Él, lo que quiere es crear conciencia en nosotros para que sus propuestas, que son, la paz, la justicia y la reconciliación la asumamos correctamente.

La paz que desea Jesús,  no es una paz como la que viven los muertos, ni tampoco en el mantenerse neutral ante las circunstancias; NO.

Recordemos que en la última cena, Jesús les dijo a los discípulos: " Les dejo la paz, mi paz les doy, no se las doy como la da el mundo" y esto nos ha de aclarar mucho más, lo que hoy el Evangelio de Mateo nos quieren decir, cuando Jesús asegura que "No ha venido a sembrar paz".

Jesús no vino a adormecer nuestras conciencias y quienes nos hemos hecho sus discípulos  y vive su experiencia, siente que Jesús es centro de su vida y por tanto, rompe los esquemas que el mundo atrae y da muerte al actuar del hombre. 

Al decirle a Jesús, te seguiré a donde vayas tomamos seriamente la decisión de renunciar a todo, es decir, al egoísmo, las injusticias, las avaricias, aunque ello requiera de sacrificios y renuncia a intereses personales. 

Pero, ojo: no es Jesús quien divide; Él pone sus condiciones: Vivir para si mismo o para Dios y los demás.

Es poner en primer lugar lo que en la vida nuestra debe ocupar el primer puesto y situar en su respectivo lugar  lo que es secundario. 
Y ésta es la cruz que nos invita a cargar: ser coherentes  y  radicales.

Preguntémonos: ¿Que tipo de prioridades estamos asumiendo? ¿Como estoy viviendo mis relaciones con los demás? ¿Quien ocupa el primer puesto en mi vida?

LES INVITO A QUE SEAMOS MULTIPLICADORES DE ESTOS MENSAJES QUE HABLAN DE LA PALABRA DE DIOS DIARIA ENTRE SUS AMIGOS Y FAMILIARES. TODO PARA LA GLORIA DE DIOS.
 
posted by Laureano García Muentes at 6:57 a.m. | Permalink |


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