sábado, julio 04, 2020
REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
Sábado 4 de Julio del 2020

JESÚS NOS PIDE CAMBIAR NUESTROS PENSAMIENTOS Y PROCEDERES PARA ASÍ VIVIR A PLENITUD SU AMOR."

"Dios anuncia La Paz a su pueblo"..." Voy a escuchar lo que dice el Señor: Dios anuncia La Paz a su pueblo y a sus amigos y a los que se convierten de corazón"...Salmo 84.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 9, 14-17 nos muestra a Jesús enfrentando las críticas de los hombres que seguían a Juan Bautista  quienes se muestran rezagados "en él como está avanzando la historia en el tiempo y la forma como hoy, hemos de mirar, el proyecto de Dios para la humanidad"

Esta manera de actuar la podemos apreciar aún hoy, en nuestros medios. 
¿Cuánto de nosotros nos sentimos como "hombres perfectos e incorruptibles" porque conocemos al dedillo las leyes y sus normas; y ello, nos da la capacidad y la autoridad para, señalar, juzgar y criticar y dejando a su hermano o amigo como un indeseables e ignorante?

Esta forma de actuar nos coloca en las puertas de la intolerancia y el desprecio

Vamos muchas veces a celebraciones, fiestas, encuentros, y estamos pendientes de los que llegan, como visten, como se sientan y hablan, y hasta como bailan. Nos creemos poderosos y jueces sin darnos cuenta que ese proceder va en contra de las propuestas que Jesús nos enseña, que tenemos que vivir en el AMOR, la TOLERANCIA y EN LA VIDA UNIDA Y FRATERNA.

Estamos actuando como esos "Odres Viejos" al que se refiere Jesús hoy en esta Palabra, cuando dice: " Nadie echa vino nuevo en odres viejos, pues los odres reventarían, el vino se derramaría y los odres se echan a perder. El vino nuevo se echa en odres nuevos y los dos se conservan" Mt 9, 17

Hay que luchar con mucha insistencia para transformar nuestras vidas y procederes. Tenemos que Reciclarnos constantemente para así, recibir y conservar dentro de nuestros corazones el vino nuevo que es Jesús

Recordemos que Dios siempre estará con nosotros y dispuesto a ayudarnos y apoyarnos en nuestras decisiones de cambio

No podemos estar tristes y encerrarnos en nuestras trincheras angustiados y entristecidos por las circunstancias que nos afligen. Somos valientes guerreros y como tales, tenemos que levantarnos y tomar las armas que Dios nos ha dado para luchar y avanzar. 

Vivamos pues a plenitud el Amor que nos ha regalado Dios y veremos que todas las cruces serán livianas y ligeras. 

Les invito a que multipliquemos la invitación a leer estos mensajes de Reflexión de la Palabra diaria entre tus familiares y amistades. Todo para la Gloria de Dios 

 
posted by Laureano García Muentes at 6:26 a.m. | Permalink |


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