REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
Martes 26 de Mayo del 2020
JESÚS ORA AL PADRE POR NOSOTROS SUS DISCÍPULOS Y PIDE QUE NOS CUIDE EN SU NOMBRE. COMO GESTO DE GRATITUD POR SU AMISTAD, UNÁMONOS A SU PROYECTO Y MULTIPLIQUEMOSLO POR TODO EL MUNDO"
"Reyes de la tierra, cantad a Dios "..."Derramaste en tu heredad, oh, Dios, una lluvia copiosa, aliviarse la tierra extenuada; y tu rebaño habitó en la tierra, que tu bondad, oh, Dios, preparó para los pobres"...Salmo 67.
En el Evangelio de hoy tomado de Jn 17, 1- 11.ª, Jesús aún con sus discípulos compartiendo los últimos momentos de la cena, "levanta la visita al cielo" y pronuncia una oración por ellos.
Y, Jesús le pide al Padre que nos consagre en la Verdad y Proteja al mundo; como también, que no nos separe del mundo.
Pide que su Espíritu nos guíe, nos aliente y alimente para ser hombres y mujeres capaces de transformar el mundo con la verdad, ser sal de la tierra y luz para el mundo.
Jesús pide al Padre para que la tristeza, el desaliento producido por el aislamiento producto de su partida, no nos haga provocar depresión y tristezas.
Él hoy aún ora por nosotros y le pide a Dios Padre que nos cuide en su nombre, para que así, permanezcamos unidos como están ellos dos.
A Jesús le ha llegado la hora; la hora de su pasión y muerte en una cruz, donde muestra a la humanidad, el amor por su Padre Dios y su entrega total e incondicional por todos los hombres.
Jesús quiere de nosotros, sus discípulos, que estemos unidos a su proyecto de vida nueva y a su mismo destino; como también nos envía a que extendamos por todo el mundo y en todos los lugares su obra de la salvación, sin distingo de razas, religiones y clases sociales.
Él quiere, que la Bondad de Dios sea conocida con nuestros ejemplo de una vida ejemplar y consagrada donde se demuestre a la humanidad que nuestra participación en su gloriosa Resurrección es el Único Camino para llegar a la Verdadera Vida en Abundancia.
Hoy Jesús nos enseña a orar en medio de nuestros temores, tristezas y penas. Él, nos dice que se preocupa por nuestros sufrimientos y angustias y nos pide fidelidad y firmeza porque, Él las vivió también de la misma manera y dio como ejemplo de su entrega incondicional hasta su propia vida por el amor a todos nosotros.
Agradezcamosle a Él su gran amistad y por todo lo que hace por nosotros; y como gesto de gratitud, comprometámonos a la grandeza de su proyecto, que no es más, el sentir amoroso de Dios por toda la humanidad.
Les invito a que multipliquemos la invitación a leer estos mensajes de Reflexión de la Palabra diaria entre tus familiares y amistades. Todo para la Gloria de Dios Padre.
posted by Laureano García Muentes at 6:44 a.m.