REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
Domingo 26 de Abril del 2020
"JESÚS NOS INVITA A DAR A LA HUMANIDAD LA GRAN NOTICIA DE SU RESURRECCIÓN. A DEJAR VACÍO NUESTROS CORAZONES PARA QUE EL, SEA CENTRO EN NUESTRAS VIDAS."
" Señor, nos enseñas el sendero de la vida"
"Protegernos Dios nuestro, que nos refugiamos en ti. Le decimos hoy al Señor: "Señor, tú eres nuestro Dios". El Señor, es lote de nuestra heredad y nuestra copa, nuestra suerte está en sus manos "...Salmo 15.
Hoy el Evangelio de Lc 24, 13-35 nos narra esa hermosa experiencia vivida por dos discípulos de Jesús, que ante la desesperanza y entristecidos se marchan a una aldea llamada Emaús que distaba de Jerusalén unos setenta kilómetros.
Mientras conversaba y discutían sobre todo lo sucedido, Jesús en persona se les presenta y se puso a caminar con ellos, pero sus ojos, no fueron capaces de reconocerlo Lc 24, 13-16.
Miremos algo muy importante en estos tres versículos:
Los discípulos emprenden un caminar. Ellos están tristes y afligidos; además, desesperanzados porque en quien confiaban que les iba a sacar de la pobreza y de todas las situaciones que vivían, lo mataron.
Los dos(2) discípulos se abren desde la nostalgia hacia la resurrección.
Ellos estaban pensando que todo había terminado con la muerte de su líder; pero, mientras caminaban, Jesús en persona se les presenta, pero, por estar distraídos y sumidos en la derrota, no le reconocen como el Salvador.
Él, les pregunta: "¿Qué les sucede a ustedes, de que conversan?; ellos se detienen y uno de los dos se sorprende porque este hombre aparecido, desconoce lo acontecido con Jesús.
Jesús, haciéndose el desprevenido les dice: "¿Que cosa?" y le explican lo sucedido" .Lc 24, 17-24.
Aquí podemos ver, como Jesús es un peregrino hace también camino y se da a conocer cuando el hombre toma la decisión firme de adentrarse en su corazón para descubrir lo que lo tiene envuelto en la tristeza, las frustraciones y la desesperanza y... con fe y confianza; es capaz de dejar vacío su corazón para darle cabida a la vida abundante que el Resucitado ofrece mediante sus Palabras escritas en las Sagradas Escrituras.
Estos discípulos le brindaron la hospitalidad al peregrino desconocido y se dispusieron a escucharle los relatos que de Él, hablaron los profetas, y miren, ya en casa, al caer la noche, reunidos en la misma mesa, ese hombre, quien les parecía ser un peregrino de paso se convierte en un anfitrión y comparte con ellos el Pan.
Si, Le reconocieron y las tristezas y preocupaciones se dispersaron y se convirtieron en alegría hasta el punto, que regresaron afamados a Jerusalén, donde estaban reunidos los otros discípulos a dar la Gran Noticia: JESUCRISTO HA RESUCITADO, EN VERDAD HA RESUCITADO!!!
Hoy les invito a que reflexionemos sobre esos momentos decisivos donde tu y yo notamos haber pasado de la muerte a la vida y escribamos en un libro abierto, nuestra propia historia.
Les invito a que multipliquemos la invitación a leer estos mensajes de Reflexión de la Palabra diaria entre tus familiares y amistades. Todo para la Gloria de Dios Padre.
posted by Laureano García Muentes at 7:19 a.m.