REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
Miércoles 11 de Septiembre del 2019
"DICHOSOS USTEDES...AY DE USTEDES..."
Elevemos a Dios nuestras oraciones y agradezcamos por todo lo que día a día nos regala. Él es Misericordia y fuerza en nuestro diario caminar.
"Hermanos: Si hemos resucitado con Cristo, busquemos los bienes del cielo, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios, pensemos en las cosas del cielo y no en las de la tierra." Col 3.1-2.
La primera lectura de hoy tomada de la carta de San Pablo a los Colosenses nos ayuda a situarnos en el ideal de quienes queremos seguir al Maestro Jesús haciéndonos semejantes en su proceder compasivo hacia los más pobres y necesitados de su Amor misericordioso.
Todos los que escuchamos su llamada y le seguimos, deseamos sobremanera alcanzar la perfección de nuestro SER e ir caminando junto a Cristo.
Es por ello, que Jesús en el Evangelio de hoy tomado de Lc 6.20-26 demuestra a sus discípulos que su mayor complacencia está en la acogida a los pobres.
Jesús les decía: "Felices los pobres, porque el reino de Dios les pertenece. Felices los que ahora pasan hambre, porque serán saciados. Felices los que ahora lloran, porque reirán. Felices cuando los hombres los odien, los excluyan, los insulten y desprecien su nombre a causa del Hijo del Hombre. Alégrense y llenen se de gozo porque el premio del cielo es abundante." Lc 6.20-23
Nos preguntamos entonces: ¿porque esa preferencia de Jesús por ellos?
Si miramos nuestro entorno, el de hoy como el de ayer, podemos percibir que los pobres son aquellos que las esferas gobernantes siempre apabullan y maltratan. Ellos, no poseen las mismas facilidades del rico o acomodado; y su calidad de vida es muy inferior.
No poseen vivienda, comida, educación, servicios sociales y médicos, etc. Mientras que los ricos y acomodados se vanaglorian de su poder y su dinero.
Jesús en cierta ocación les dijo a ellos: "Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico o portentoso alcance el Reino de Dios. " Mt 19.23-30
Quien sigue al Maestro no ostenta y va acorde a sus ideales. Es prudente, justo y es Amor Misericordioso para con aquellos que sufren y son marginados de la sociedad.
Pidámosle al Espíritu Santo que nos ayude a ser Compasivos y Misericordiosos y a que sin condiciones, escojamos a aquellos que hoy necesitan de nosotros.
posted by Laureano García Muentes at 3:14 p.m.