sábado, febrero 13, 2010
ESTEMOS ATENTOS Y VIGILANTES PARA NO DARLE ESPACIO AL PESIMISMO Y AL MIEDO

Hoy es un día de victoria porque confiando en la fuerza que nos da el Espíritu Santo salimos más que triunfadores ante todas las pruebas, dificultades y problemas que asechan la vida. Dios está con nosotros, nos hace felices, confiemos y creamos plenamente en Él.

San Pablo en su carta a los Romanos 8.37 nos recuerda un mensaje que fortalece nuestro corazón y que siempre debemos llevar presente en medio de esos desaciertos que a veces nos llenan de pesimismo y miedo para continuar la vida. Él nos dice: “ Pero en todo salimos más que vencedores por medio de Aquel que nos amó”.

Es Jesús quien nos anima y sus palabras nos llenan de confianza. San Juan así lo expresa en su Evangelio, Cáp. 16. 32-33: “ Yo les digo todo esto para que encuentren paz en su unión conmigo. En el mundo, ustedes habrán que sufrir, pero tengan valor: Yo he venido al mundo”.

Los invito a que hoy nos sentemos un instante y a solas, en un encuentro personal, recapacitemos estas frases. Es oportuno que aceptemos las mil batallas donde tenemos que poner nuestro pecho y todo empeño como buenos guerreros. Pensemos que para salir victoriosos hay que enfrentar momentos duros que nos van hacer sufrir. Pero tengamos la absoluta seguridad que así como el Señor ha venido al mundo para enfrentar todo tipo de situaciones y dolores porque nos amó hasta el extremo, nosotros sus seguidores, junto a Él, vamos a recibir todas sus bendiciones, su fuerza y su poder, para salir airosos y más que vencedores.

Estoy seguro que todo es posible para el que cree y escucha al Señor. ¡Si!. Si creemos en el poder misericordioso de Dios con toda seguridad vamos a salir adelante, porque nadie más que Dios tiene tanto poder en el mundo para calmar e increpar los males que se presentan en la vida.

Esa pobreza, ese abandono, esa soledad, los momentos de tristeza, el dolor profundo y esos pensamientos negativos que nos llenan de pesimismo y miedo, van a ceder porque Dios está al lado nuestro.

Los invito a que leamos una y otra vez las citas que anoté en este escrito y tratemos de meterlas en nuestros corazones para tenerlas siempre presente a lo largo de nuestros días. ¡Adelante, animó! actuemos con seguridad al lado de Jesús, nuestro Salvador.

SEÑOR, NO PERMITAS QUE LOS MIEDOS Y LAS PREOCUPACIONES NOS QUITEN LOS SUEÑOS.
 
posted by Laureano García Muentes at 5:33 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>