Quienes nos hemos atrevido a seguir los pasos de Jesús percibimos cada día, que en el mundo de hoy son muchos los hombres y mujeres que han ido encausando de manera diferente y contraria su vida a la oferta original que Dios nos ha señalado. A ellos solo les importa el dinero, el poder, el honor y miran de manera extraña a quienes, optando de manera opuesta a su cause, se manifiestan a los demás de manera solidaria, en igualdad y entregan su vida al servicio de los demás.

Al igual que Jesús, nos preocupamos por ellos y queremos enseñarles el camino que les permita descubrir la verdad diciéndoles con seguridad, que dejen de ser signos de contradicción y de vivir de manera egoísta y acumulando deleites ficticios que solo engañan y destruyen al hombre.

Y es que eso es verdad, no lo digo porque se me ocurre. Parece que en el mundo de hoy solo funcionan los sistemas hechos por el hombre y que solo quieren ir fomentando y satisfaciendo las apetencias del poder, del prestigio y el dinero; solo se piensa en la competitividad, la represión de las libertades y el enfrentamiento de los unos con los otros.

Los cristianos de hoy que vivimos las bienaventuranzas seremos siempre para ellos como cuerpo extraño en el organismo social, porque siguiendo los huellas del Maestro, nos mostramos intransigente frente a toda dominación y explotación del hombre por el hombre. De allí,que nos miran de esa manera.

A Jesús lo crucificaron y lo mataron por decir la verdad “Ser el Hijo de Dios”, lo consideraron subversivo. No tuvo una vida tranquila, no lo dejaban en paz, porque su mensaje era lleno de esperanzas para los oprimidos.

Quien desea descubrir la verdad ha de estar en paz con Jesús. El camino de seguirle no es fácil, Jesús en sus Palabras escritas en los Evangelios así lo demuestran. Ser cristiano es ser signo de contradicción, es ser un hombre o una mujer que asume los indicadores evangélicos de una vida agradable a Dios y que cumple la misión encargada por el Maestro.


SEÑOR, TU NOS HAS PROMETIDO ESTAR CON NOSOTROS TODOS LOS DÍAS HASTA EL FIN DEL MUNDO, NUNCA NOS DEJES HUÉRFANOS, Y DONDE ESTÉS TÚ ESTAREMOS NOSOTROS.