martes, octubre 30, 2007
SER RESPONSABLES DE NUESTRA VIDA

Pensaba hoy a cerca de esas actitudes de muchos de nosotros ante cualquier eventualidad o circunstancia de la vida; y apuntaba como algunos huyen, se marginan y se encierran dentro de su propio yo, sin pensar un solo instante como buscar la manera o forma de superar y atravesar esas barreras que nos depara la vida.

Analizaba después de ver el video de Tonny Meléndez cuando hizo su presentación en el homenaje de acogida que se le brindó al Papa Juan Pablo II en su visita a los Estados Unidos, como hoy son muchos los hombres y mujeres que nos regalan actitudes ejemplarizantes ante su incapacidad física, dando muestras a toda la humanidad de su fuerza interior por superar y seguir la lucha, siendo responsables de la vida que regala Dios y aceptándola tal cual como es.

Son ellos, un ejemplo de superación. Algunos sin sus brazos hacen grandes maravillas con sus pies y boca, otros que por falta de sus piernas, en sillas de rueda, participan en olimpiadas deportivas obteniendo grandes triunfos, otros sordo- mudos, componen grandes canciones, cantan e interpretan con admiración de muchos, instrumento musicales a la perfección; convirtiéndose así, en lideres forjadores de esperanzas que nos muestran testimonio de superación y lucha, donde nada les es imposible realizar y alcanzar.

Y es allí, hacia donde mi reflexión va encaminada; ayudar a muchos de los que hoy viven situaciones adversas, para que experimenten la lucha que han de tener y la confianza llena de esperanza hacia una nueva vida forjada con decisión y constancia, buscando medios y métodos que permitan dejar atrás y a un lado los obstáculos, problemas y situaciones, que agobian, entristecen y opacan.

Sabemos que somos débiles y frágiles; y la vida cada día trata de hacernos conscientes de esa realidad humana con sus ataques, problemas, dolores y situaciones difíciles que tenemos que vivir y hasta sufrir. Pero en medio de ellas, esta en forma incondicional la presencia de Dios que nos alienta, nos da fuerza y el poder para superarlas. Dios nunca nos deja solos. Él actúa sin reparos y sin señalamientos, siempre a nuestro favor porque nos ama y capacita para enfrentar con valentía todas las situaciones de la vida; además, nos alimenta de seguridad para que podamos triunfar y seguir adelante.
Por eso, es necesario que cada uno de nosotros tomemos conciencia que somos hechos por Dios para triunfar y lograr objetivos, sumando a cada momento felicidad, alegría y buenas decisiones.


TEN ÁNIMO, DIOS ESTÁ EN TI Y CON ÉL PUEDES ALCANZAR LO QUE TE PROPONGAS.
 
posted by Laureano García Muentes at 9:38 a.m. | Permalink |


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