viernes, marzo 16, 2007
¡ SANARNOS !
¡ SANARNOS !

En todo tiempo a través de la historia y en especial cuando entramos a vivir los tiempos de la cuaresma y pascua; en el ambiente, se revive la necesidad de que todos los hombres tenemos que sanarnos.

El hombre como ser social e inmiscuido en el mundo, ve como en todas las poblaciones y lugares se vive la descomposición moral debido a la inmadurez de la fe, en su olvido de Dios y en el rompimiento con la voluntad de Dios.

Y la verdad es que Dios siempre ha querido que el hombre, criatura suya, sea su hijo, su interlocutor, para que pueda construir su vida, su mundo, sus costumbres y su casa, sobre roca firme. Esa roca que es Cristo.
Por ello, debemos vivir una vida de armonía, reconciliación, perdón, justicia y paz marcada siempre por el mandato del amor.

Hoy sin embargo el hombre sigue reacio, evasivo y distraído ante tantas propuestas e invitaciones para sanar y aceptar a Dios.
Esta realidad es ineludible y no la podemos tapar con nuestras manos. Al romper con Dios y con sus hermanos, el hombre busca afanosamente muchas cosas que somete a sus propios intereses y que muchas veces hace uso indebido y se convierte en destructor. Se convierte en un esclavo de las cosas que son del mundo y que son temporales y se cree el dueño y señor de todo. Para él, ya no es Dios la causa principal de su vida, el que anima su quehacer diario, sino es el afán, el egoísmo, el poder, el tener, el placer, etc.

Frente a este frió panorama, los cristianos comprometidos en popularizar el Evangelio de Jesucristo y darlo a conocer como el único y verdadero camino que nos conduce a la casa del Padre, insistimos en convencer a todos los hombres que es necesaria la sanación y el retorno a la casa de Dios.

Somos todos, sin excepción, los que estamos invitados a examinarnos y cuestionarnos como han sido nuestras actitudes y comportamientos. A emprender el camino de conversión, de la reestructuración y de la transformación del mundo y de la sociedad.
Requerimos del empeño inteligente y decidido de todos quienes hemos optado por seguir de verdad a Jesús. Por ello, hoy quisiera invitarte a construir proyectos de vida que sean testimonio vivo de ser discípulos de Jesús, de trabajar en nuestros medios sin temor y sin miedo a asumir con fidelidad la defensa de la vida y a descubrir cada día en medio de todas las dificultades los signos que nos lleven a manifestar a Dios.


NUESTRO COMPROMISO ES SALVAR Y SANAR A LOS HOMBRES. UNETE A NOSOTROS
 
posted by Laureano García Muentes at 4:42 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>