miércoles, octubre 16, 2024

"El que te sigue, Señor, tendrá la luz de la vida"...Salmo 1

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Miércoles 16 de Octubre del 2024

En el Evangelio de hoy tomado de , Jesús denuncia ante el pueblo  la hipocresía y la incoherencia de los líderes religiosos y les dice que la Ley que ellos predican y practican debe estar orientada al servicio del prójimo.

Él hablando con autoridad y libertad les dice: “¡Ay de ustedes, fariseos, que pagan el impuesto de la menta, de la ruda y de todas las legumbres, y descuidan la justicia y el amor de Dios! Hay que practicar esto, sin descuidar aquello. ¡Ay de ustedes, fariseos, porque les gusta ocupar el primer asiento en las sinagogas y ser saludados en las plazas!. ¡Ay de ustedes, porque son como esos sepulcros que no se ven y sobre los cuales se camina sin saber!” Un doctor de la Ley tomó entonces la palabra y dijo: “Maestro, cuando hablas así, nos insultas también a nosotros”. Él le respondió: “¡Ay de ustedes también, porque imponen a los demás cargas insoportables, pero ustedes no las tocan ni siquiera con un dedo!”. Lc 11,42-46. 

Jesús ya conocía el proceder de los Fariseos como líderes religiosos, pues despreciaban las cosas esenciales y les interesaba más aparecer como personas cumplidoras de la ley e irreprochables. Querían que toda la gente los ensalzaran por ser piadosos. Pero Jesús los ataca directamente y los descubre delante de la gente diciéndoles que eran arrogantes e hipócritas, y simulaban ser grandiosos y pulcros. Él les reclama diciéndoles: "Practiquen la ley sin descuidar lo frágil y pequeño brindándole a la gente lo fundamental: El amor y la Justicia al prójimo".

Él recalca que en la ley lo más importante es la justicia, porque para que ella tenga valor ha de ser justa, respetuosa de los derechos.

Hermanos, Jesús crítica abiertamente la hipocresía que mantiene al hombre con una apariencia de engaño y en base a ello, insistían a la observancia disciplinar de la ley. Preguntémonos,  ¿Cómo está siendo nuestro actuar frente a los demás?, ¿Práctico la justicia y el amor hacia aquellos que sufren y necesitan de nosotros?

Todos tenemos algo de los fariseos. Presumimos de cumplir preceptos sin importancia y nos olvidamos de los mandamientos más importantes. A veces ni siquiera nos damos cuenta. Necesitamos la ayuda de los hermanos para ser conscientes de esta realidad.

Pidámosle al Señor que nos ayúdame a descubrir nuestras  incoherencias y danos la humildad para reconocerlas como también, las fuerzas para superarlas. Enséñanos a corregir con cariño y acierto las incoherencias de nuestros hermanos.

 
posted by Laureano García Muentes at 5:44 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>