martes, marzo 05, 2024

"Señor, recuerda tú misericordia"... Salmo 25.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Martes 5 de Marzo del 2024

INTRODUCCION:

La parábola de hoy nos ayuda a comprender plenamente el significado de esa frase que recitamos en la oración del Padre nuestro«Perdónanos nuestras deudas, así como nosotros perdonamos a nuestros deudores». Jesús enseña que el perdón no es cosa de números no es matemática pura sino norma de generosidad y significa “siempre”. No se puede encerrar en números lo que debe ser impulso de un corazón lleno de amor. Jesús que manda amar como Él nos ha amado, impone la misma norma para el perdón: así hará mi Padre celestial si no perdonáis de corazón. Perdonar de corazón significa: amar como Dios ama cuando perdona.

En el Evangelio de hoy tomado de Mt 18, 21-35, nos relata que Pedro le preguntó a Jesús: "Señor, si mi hermano me ofende, ¿Cuántas veces tengo que perdonarle? ¿Hasta siete veces?". Jesús le respondió: "No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete". Y entonces le dijo la parábola del Servidor despiadado.

Jesús relata la historia de un rey que decide perdonar una gran deuda a uno de sus siervos, pero este siervo, a su vez, se niega a perdonar a un compañero su deuda mucho más pequeña. 

El rey, al enterarse de esto, se indigna y revoca su perdón, castigando al siervo despiadado. 

Esta parábola nos enseña que el perdón que hemos recibido de Dios es inmenso, y que a su vez debemos reflejar esa misma generosidad al perdonar a los demás. 

Cuando nos aferrarnos a la amargura y nos negarnos a perdonar, no solo nos hacemos daño a nosotros mismos sino también a los que hemos ofendido, pues el acto de perdonar libera nuestra alma del resentimiento y nos permite sanar nuestras relaciones interpersonales con los demás.

Así como el rey en la parábola representa a Dios, perdona de manera incondicional a su siervo, así mismo espera que nosotros mostremos esa misma gracia y comprensión hacia nuestros semejantes.

¡Ya que sabemos estas cosas, vamos a ponerlas en práctica! 

Señor, necesitamos de tu perdón y tu misericordia. Sabemos que podemos acudir a ti con todos nuestros defectos y pecados. Tú quieres perdonarnos, nos esperas con tu corazón de Padre Misericordioso para que lleguemos y aceptemos tu gran amor. Tú reinas y gobiernas con misericordia, y nada te agrada más que poder perdonar.

 
posted by Laureano García Muentes at 4:09 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>