"Instrúyeme, Señor, en tus leyes"...Salmo 119.
REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY
Lunes 1 de Agosto del 2022
San Mateo subraya el aspecto personal de la experiencia de Jesús, su compasión. En medio del desierto, o bien en algún lugar solitario, fuera de los pueblos y de las ciudades, se presenta un problema humano, muy concreto: dar de comer a la muchedumbre de gente que le sigue. Enviarlos a sus casas es la respuesta obvia de los discípulos. Darles de comer es la respuesta de Jesús. Ésa es también la respuesta de su acción como Mesías. Cinco panes y dos peces, sólo para comenzar, constituyen la base para un insólito milagro de multiplicación de los alimentos, un milagro destinado a saciar a una muchedumbre de más de cinco mil personas.
El Evangelio de hoy tomado de Mt 14, 13-21 nos narra el milagro de la multiplicación de los panes, donde Jesús después de enterarse del asesinato de Juan Bautista cruza en barca el mar de Galilea para ir a un lugar despoblado, pero, al llegar a la otra orilla, vio que una gran multitud le seguía. Al atardecer los discípulos le fueron a decir: "Estamos en despoblado y es muy tarde, despide a la multitud para que vayan a las aldeas y se compren de comer."
Jesús les replicó: "No hace falta que vayan, dadles vosotros de comer." Ellos le replicaron: "Si aquí no tenemos más que cinco panes y dos peces." Les dijo: "Traédmelos." Mandó a la gente que se recostara en la hierba y, tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y se los dio a los discípulos; los discípulos se los dieron a la gente. Comieron todos hasta quedar satisfechos y recogieron doce cestos llenos de sobras. Comieron unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños". Mt 14, 13-21.
Como lo vemos en el texto del Evangelio, Jesús invita a sus seguidores a que alimentemos a nuestros hermanos con la Palabra que procede de Dios. Que no solo cubramos sus necesidades con ayudas económicas, sino que seamos portadores de la alegría del Evangelio. Por ello, hoy nos dice: "Lo habéis recibido gratis, dadlo gratis" es decir, que tú y yo podamos contagiar a muchos de la gracia y la misericordia de Dios.
Jesús nos invita a ser compasivos para que así, nos podamos mover y actuar, es decir, para aproximarnos a los que necesitan de una mano amiga para darles sin condición alguna los dones que gratis nos a regalado Dios y para darles a conocer el verdadero camino que nos conduce a Él.
Señor, ayúdanos a comprender que lo que somos y tenemos tiene un valor en la medida en que lo compartamos y participemos en las redes de solidaridad buscando lograr que sean muchos los que reciban de nosotros lo que Tu, nos ha dado gratis.