domingo, mayo 22, 2022

"¡Oh Dios, que todos los pueblos te alaben!"...Salmo 67.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Domingo 22 de Mayo del 2022

Jesús anuncia a sus discipulos que «cuando dos o más de ellos se reúnan en su nombre allí estará en medio de ellos». Quiere decirse que la comunidad fraterna, el grupo de apóstoles que se aman entre sí, que se reúnen en su nombre, que dan testimonio del Resucitado, que oran juntos, que comparten sus bienes, que meditan y disciernen juntos, que parten juntos el Pan... es el «lugar» de su presencia, donde acudiremos para encontrarle.

Como lo podemos leer en el Evangelio de hoy tomado de Jn 14, 23-29, Jesús se despide de sus discípulos y les dice que en poco tiempo no seguirá con ellos. Ellos sienten miedo al saber que quedarán solos; pero, Él, para animarlos, les confía este, su deseo: "El que me ama guardará mi palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él. El que no me ama no guardará mis palabras. Y la palabra que estáis oyendo no es mía, sino del Padre que me envió. Os he hablado de esto ahora que estoy a vuestro lado, pero el Defensor, el Espíritu Santo, que enviará el Padre en mi nombre, será quien os lo enseñe todo y os vaya recordando todo lo que os he dicho. La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy yo como la da el mundo. Que no tiemble vuestro corazón ni se acobarde. Me habéis oído decir: "Me voy y vuelvo a vuestro lado." Si me amarais, os alegraríais de que vaya al Padre, porque el Padre es más que yo. Os lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda, sigáis creyendo" Jn 14, 23-29.

Las despedidas por lo general son muy tristes y hasta dolorosas sobre todo, cuando sabemos que un ser amado  se nos va de nuestra presencia física.

Nuestros corazones quedan llenos de recuerdos, de las alegrías vividas y todos esos bellos momentos que fueron compartidos. Pero Jesús les promete que no Irán a quedar solos, pues, en poco tiempo les enviará el Espíritu Santo para que Él les conduzca por el camino y les llene de las fuerzas necesarias para trabajar en cualquier lugar del mundo llevando a todos los hombres la paz, la justicia y  el amor. 

Hermanos, el próximo domingo celebraremos la Ascensión del Señor, como también, el siguiente, la Venida del Espíritu Santo en el día de Pentecostés y con Él, podremos acrecentar nuestra Fe, el amor y todas las demás virtudes que por la caridad de Dios nos ha sido dada.

Experimentemos la cercanía  y amistad que nos brinda Jesús y animémonos a seguir con alegría el gozo de vivir la Buena Nueva que nos ha dado gratuitamente. 

Señor, creemos en tu Palabra, envíanos a tu Espíritu Consolador para que nos guie y acompañe cada día de nuestras vidas. Necesitamos de tu gracia para salir de nuestra mediocridad, de nuestra cobardía y nuestros egoísmos anti valores que endurecen el corazón y nos hacen perder la paz.

 
posted by Laureano García Muentes at 5:58 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>