"Ensálcenlo con himnos por los siglos"...Dn 3.

Miercoles 24 de Noviembre del 2021

Jesús nos pide hoy ser testimonios para seguirle con eficacia. Él nos marca un estilo y una forma de vida que nos ayuda a resistir y perseverar para que así, lograr la meta deseada.

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 21,12-19, Jesús nos invita a Resistir y a Perseverar para que podamos alcanzar la plenitud de vida a la que hemos sido invitados.

Él hoy exhorta a todos los que le siguen diciéndoles: " Los detendrán, los perseguirán, los llevarán a las sinagogas y a las cárceles, los conducirán ante reyes y magistrados a causa de mi nombre, y así, tendrán la oportunidad de dar testimonio de mi. Háganse el propósito de no preparar su defensa, yo les daré una elocuencia y una prudencia que ningún adversario podrá resistir ni refutar. Hasta sus padres y hermanos, parientes y amigos los entregarán y algunos de ustedes serán ajusticiados; y todos los odiarán a causa de mi nombre. Sin embargo no se perderá ni un pelo de su cabeza. Gracias a la constancia salvarán sus vidas" Lc 21, 12-19.

Con esas palabras Jesus nos muestra que el camino por recorrer no es fácil, y no nos equivocamos cuando pensamos que tendremos una recompensa después de la muerte: La vida eterna en el cielo. 

Los hombres y mujeres que hoy son bienaventurados y admirados en la fe, vivieron persecuciones, desprecios, secuestros, encarcelamientos, violaciones y hasta la muertes violentas. Fueron mártires por la causa del Reino de Dios; y ello significa que el camino a seguir para alcanzar la vida eterna está lleno de dificultades y de luchas constantes. Es un camino, donde se viven momentos críticos, de desconcierto y hasta de confusión; por ello, Jesús nos advierte: "No se engañen, ni se dejen engañar por nadie". Él nos invita a no ser ingenuos para creer en cosas fuera del mensaje de los Evangelios. 

Nuestra responsabilidad es la de crecer en la fe y en la sabiduría que nos regala el Espíritu Santo, pues nuestro papel es el dar testimonio de vida en todos  los tiempos difíciles que vivamos. 

Estamos pues invitados hoy a cultivar un estilo de vida paciente que nos ayude a responder a las necesidades y situaciones sin perder la paz. 

“Gracias, Señor, por el testimonio de los mártires. Danos tu fuerza para que continuemos su lucha en favor de la vida, la libertad y la justicia”.