"Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec"..."Oráculo del Señor, a mi Señor: "Siéntate a mi derecha, y haré de tus enemigos estrado de tus pies"...Salmo 109.

Miércoles 27 de Enero del 2021

JESUS CONFIA EN NOSOTROS LA RESPONSABILIDAD DE SEMBRAR SU PALABRA EN TODOS LOS LUGARES DONDE NOS ENCONTREMOS.

El Evangelio de hoy tomado de Mc 4, 1-20, nos muestra una gran enseñanza de Jesús para ilustrar algunas características del Reino de Dios. En ella, utiliza un simbolismo muy rico en significado.

La que describe hoy el texto del Evangelio es La parábola del Sembrador y que después de ser anunciada, Él mismo explica  a sus discípulos.

Jesús utilizaba las parábolas para atraer la atención del público y lo hacía, utilizando temas del diario vivir; cuando las terminaba de proclamar, su interpretación las dejaba abierta a la responsabilidad de cada uno; el lo dejaba así muy claro: "El que tenga oídos para escuchar, que oiga".

Como se aprecia en el texto del Evangelio, Jesús confía en nosotros la responsabilidad de la acción  de esparcir la semilla de la Palabra, y que ésta, caiga en tierra buena y produzca más tarde, frutos abundantes; es decir, encuentre respuesta.

Al discernir el Evangelio, podemos percibir que Jesús  nos presenta cuatro posibilidades o resistencia que se pueden  encontrar al esparcir la Semilla de Palabra: La dureza de corazón es decir, aquellos, que creen que no necesitan  nada más de lo que ya tienen, Los que son *Superficiales, que no dejan que la Palabra germine en sus vidas por no tener una fe firme, Los que Muestran interés y se entusiasman, pero, cuando les invaden las preocupaciones y los intereses, la apartan. Y por último, están Aquellos que: ACOGEN, VALORAN Y APRECIAN LA SEMILLA Y LA CUIDAN PARA QUE AL SEMBRARLA DE ABUNDANTES FRUTOS

Preguntémonos: ¿A cuál de estos cuatro grupos pertenezco?, ¿ Estaré anunciando la Palabra con mi vida para demostrarle a Dios que se hizo buena la siembra?

Recordemos hoy lo que nos dice el Evangelio de Mt 13, 10-17: "Dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen. Porque en verdad os digo que muchos profetas y justos desearon ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que vosotros oís, y no lo oyeron".

ESTAMOS LLAMADOS POR JESUS A SER SEMBRADORES DE LA PALABRA DE DIOS EN TODO TIEMPO Y EN TODO LUGAR DONDE EL AMOR POR EL, NOS LO INSPIRE. NO ESCATIMEMOS ESFUERZO ALGUNO.