sábado, enero 11, 2020
REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
Sábado 11 de Enero del 2020

"JESÚS NOS SEÑALA CUAL ES EL SENTIDO PRINCIPAL DE SU OBRA DE LA SALVACIÓN


Señor danos el don de la humildad para hacernos firmes en la decisión que hemos tomado de ser tus amigos y seguidores. Estamos seguros que con ella, podremos brindar a otros el mejor testimonio de vida para que nos sigan. 



Hay en el Evangelio de hoy tomado de Jn 3, 22-30 algo muy importante que Jesús nos subraya: Cual es el sentido principal de su obra que nos lleva a realizar una relación más próxima con Dios cimentada en la gracia que nos imprime el Espíritu Santo y la verdad de su Palabra.



Nos dice el Evangelio que Juan Bautista antes de ser puesto preso por Herodes bautizaba en Ainón, cerca a Salin, en un río con abundante agua; y por otra parte, Jesús junto a sus discípulos que estaba en Judea, aprovechó esa ocasión para ponerse también a bautizar.



Los discípulos y la gente se  mostraban desconcertada por los dos propósitos de purificación que ellos realizaban.

Buscaron a Juan y le dijeron: " Maestro el que estaba contigo en la otra orilla del Jordán, del que diste testimonio, está bautizando, y todo el mundo acude a Él. Juan les respondió: No puede un hombre recibir nada si no se  lo concede del cielo. Ustedes son testigos de que yo dije: Yo no soy el Mesías, sino que me han enviado delante de El" Jn. 3, 25-28.


Miremos algo muy importante: En el Evangelio San Juan, el Evangelista nos afirma de manera clara y sencilla, que es Jesús y su movimiento deben crecer y el asumido por Juan Bautista, decrecer Jn. 3, 30.



Como lo hemos venido asimilando a lo largo de el análisis y la reflexión de los Evangelios, Juan Bautista es un gran ejemplo para nosotros los cristianos. Un modelo a seguir. El aceptó sin reserva su papel de ser un fiel testimonio de Identidad cristiana a la humanidad y que fue capaz de conducir a muchos al Plan Salvífico de Dios en la cabeza de Jesús,  el Mesías Salvador.



Juan Bautista nunca dudó ni fue capaz de ocultarse, sino que se mantuvo firme en su propósito que le fue encomendado por Dios.



Esa actitud de Juan Bautista nos ha de invitar a ser cada vez más humildes y sencillos para así, cumplir nuestras promesas de ser  esos discípulos efectivos que necesita el mundo de hoy para así, hacer resplandecer la Luz de Jesús en todos los tiempos y lugar del  mundo sin claudicar. 


Les invito a que multipliquemos la invitación a leer estos mensajes de Reflexión de la Palabra diaria entre tus familiares y amistades. Todo para la Gloria de Dios Padre.

 
posted by Laureano García Muentes at 6:17 a.m. | Permalink |


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