miércoles, diciembre 17, 2008
EN LA NAVIDAD JESÚS NOS INVITA A SER AUTÉNTICOS

Jesús nos invita a tener autenticidad si queremos celebrar con alegría estas Navidades. Él, nos llama a vencer todo obstáculo que nos impida seguir su camino, enderezando así nuestro corazón desarmándolo del todo orgullo, egoísmo, codicia e infidelidad, arrepintiéndonos y alejándonos de todo placer, siendo verdaderos testimonios de vida para los demás.

Que maravilloso sería que hoy todos nos preguntáramos si así como hoy vivimos la vida estamos siendo aliento, luz y motivo de alegría para los demás, si sabemos ser personas sinceras, francas, humildes, insobornables. Si damos buenas noticias a los que sufren vendándoles sus heridas y enjuagando sus lágrimas.

La llegada de Jesús ha de ser una fiesta para cada uno de nosotros; Él nos trae las fuerzas necesarias que necesitamos para liberarnos de todo lo que nos mantiene atados, mediante su justicia, su amor y su paz. ¿Qué más podremos pedirle?

Es tiempo de reconciliación y el momento propicio para que allanemos nuestros caminos, procediendo ante el Señor con dignidad y honradez.

En el Evangelio de San Juan Cáp. 1. 6-8, 19-28, Juan Bautista pregonaba la necesidad que tenemos los hombres para abrir el camino, haciendo que nuestra vida sea comparable con un sendero transitable, sin huecos, con rumbo y destino; y nos previene, a estar unido a Dios ya que si de Él nos separamos, nuestra vida sería una catástrofe.

Juan Bautista nos invita a ser testimonios ante el mundo de la luz que está por surgir en el pesebre que hemos estado arreglando en estas cuatro semanas de Adviento, invitando con nuestras palabras y acciones a los demás para cambien y hagan lo mismo que nosotros hacemos.

Ser testigo significa ser fiel y responsable ante otros de lo visto y oído, si así damos a resplandecer la verdad única, seremos unos verdaderos cristianos que siguen las huellas del Maestro libertador que nos instruye y acompaña para siempre; es aceptarle en el corazón y proclamar al mundo sin miedo o temor su verdad, el deber y la injusticia que cometen aquellos que se creen más fuertes que los demás, aunque se rían de nosotros.

Oremos pues con perseverancia y demos gracias a Dios por sentirnos hoy felices por su llegada a cada uno de nosotros.

EL SEÑOR NOS GUARDE Y CONFORTE EN ESTE TIEMPO DE ADVIENTO Y PODAMOS JUNTOS CELEBRAR CON ALEGRÍA EN EL CORAZÓN LA NATIVIDAD DEL SEÑOR.

LES DESEO A TODOS Y CADA UNO DE LOS LECTORES DE QUERIDOS SALVATORIANOS UNA NAVIDAD LLENA DE LAS GRACIAS DEL SALVADOR Y QUE EL PRÓXIMO AÑO 2.009 SEA UNA LUZ NACIENTE DE ESPERANZAS PARA TODOS.

REANUDAREMOS EL DÍA 12 DE ENERO DEL 2.009 PARA INICIAR JUNTO A USTEDES UN NUEVO AÑO DE RENOVACIÓN Y VIDA ESPIRITUAL.
 
posted by Laureano García Muentes at 7:59 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>