miércoles, diciembre 27, 2023

"Alégrense, justos, con el Señor"...Salmo 96.

REFLEXION AL EVANHGELIO DE HOY

Miércoles 27 de Diciembre del 2023

Hoy celebra la Iglesia a San Juan Evangelista conocido también como "el  discípulo amado de Jesús". Pescador de Galilea, hijo de Zebedeo y Salomé, hermano de Santiago el Mayor, quienes se desempeñaban también como pescadores. Participó junto a Pedro y Santiago en la transfiguración de Jesús,  también en la agonía en el monte de los Olivos y la Resurrección. Fue el único de los discípulos que no murió martirizado. Fue autor del cuarto libro del Evangelio.

INTRODUCCION AL EVANGELIO:

La carrera a prisa de los dos discípulos hacia el sepulcro que se describe en el Evangelio de hoy, muestra el deseo de comprobar lo que les había anunciado María Magdalena.  Pedro y Juan se encuentran frente al sepulcro vacío y, este al ver el sudario y las vendas en el suelo, les bastó para creer de Jesús había Resucitado.

El Evangelio de hoy tomado de Jn 20, 2-8 nos relata la experiencia que tuvieron los discípulos Simón Pedro y Juan en la Resurrección de Jesús. El texto dice así: "El primer día de la semana, María Magdalena corrió al encuentro de Simón Pedro y del otro discípulo al que Jesús amaba, y les dijo: “Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto”. Pedro y el otro discípulo salieron y fueron al sepulcro. Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió más rápidamente que Pedro y llegó antes. Asomándose al sepulcro, vio las vendas en el suelo, aunque no entró. Después llegó Simón Pedro, que lo seguía, y entró en el sepulcro; vio las vendas en el suelo, y también el sudario que había cubierto la cabeza de Jesús; éste no estaba caído con las vendas, sino enrollado en un lugar aparte. Luego entró el otro discípulo, que había llegado antes al sepulcro: él también vio y creyó". Jn 20, 2-8.

Este Evangelio nos narra los acontecimientos ocurridos después de la Pasión y Muerte de Jesús y fue exactamente cuando María Magdalena llega corriendo a donde estaba Simón Pedro y Juan a anunciarles la Resurrección.

Un anuncio que les desconcertó pues aún no podían creer aquello de la Resurrección. Ambos corrieron, pero Juan lo hacía más rápido y llegó primero, aunque no entró al sepulcro, confirmó la noticia de María Magdalena. Él Vio y creyó.

En resumen, este pasaje nos invita a mantener la fe, la esperanza y a compartir la buena nueva del amor de Dios con los demás, incluso en medio de las dificultades.

Jesús, abre nuestros corazones como abriste la puerta del sepulcro y has que comprendamos que estás vivo y caminas a nuestro lado enseñándonos a poner toda nuestra confianza en ti como la tuvo María, tu madre. Ayúdanos a confiar  sabiendo que eres Tú quien nos aguardas.

 
posted by Laureano García Muentes at 9:46 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>