domingo, febrero 26, 2023

"Misericordia, Señor: Hemos pecado"...Salmo 51.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Domingo 26 de Febrero del 2023

Las tentaciones las podemos resumir en tres, y son: El placer, el poder y el poseer. Hoy vivimos inmersos en un mundo cuya cultura predominante es la cultura de consumo que en todo momento y en todo lugar nos va proponiendo el placer de disfrutar, el falso poder en los rostros del Dinero, la explotación y el “hacer carrera” a como dé lugar y la pretendida mentira de pensar que uno es más porque más tiene. Esto es muy común: tener la ropa de marca, disfrutar de grandes comidas, tener la casa más grande, el celular último modelo, el auto 0Km, fiestas eternas con rostros desfigurados y anónimos, vidas vertidas en vértigo y vorágine, alcohol y pastillas… Hoy por hoy el mundo en su Cultura de Consumo y Muerte se ha vuelto un lugar hostil para la Vida.  El Evangelio de hoy nos alienta a que si Jesús fue tentado, nosotros también lo seremos. Entonces en esta Cuaresma tenemos la  ocasión para poder afirmar más y mejor nuestras convicciones y nuestro ser de discípulos misioneros del Reino.

El Evangelio de hoy tomado de Mt 4, 1-11, dice que: "Jesús hizo un ayuno de cuarenta días con sus noches y al final, sintió hambre. Y acercándose el tentador, le dijo: "Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes". Mas Él respondió: "Está escrito: No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios". Entonces el diablo le lleva consigo a la Ciudad Santa, le pone sobre el alero del Templo, y le dice: "Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, porque está escrito: A sus ángeles te encomendará, y en sus manos te llevarán, para que no tropiece tu pie en piedra alguna". Jesús le dijo: "También está escrito: No tentarás al Señor tu Dios". Todavía le lleva consigo el diablo a un monte muy alto, le muestra todos los reinos del mundo y su gloria, y le dice: "Todo esto te daré si postrándote me adoras". Le dice entonces Jesús: "Apártate, Satanás, porque está escrito: Al Señor tu Dios adorarás, y sólo a él darás culto". Entonces el diablo le deja. Y he aquí que se acercaron unos ángeles y le servían. Mt 4, 1-11.

Este Evangelio es profundamente significativo por varias razones. En primer lugar, nos muestra la humanidad de Jesús y su capacidad para enfrentar las mismas tentaciones que se nos presentan a nosotros. Él experimentó hambre, cansancio y tentación, pero resistió al pecado y se mantuvo fiel a Dios.

Hermanos: El demonio le plantea a Jesús tres ambiciones por las cuales el hombre desea y lucha vehementemente en conseguir: Riquezas, Poder y Fama.

Estas razones hoy están vivas aún en nuestra vida cotidiana y social y quienes se desviven por ellas, siempre están anteponiendo  su bienestar ante el proyecto del Reino de Dios. 

Jesús respondió a las tentaciones del demonio citando las Escrituras; esto nos motiva a conocer y confiar en la Palabra de Dios para luchar y resistir al pecado.

Es esta una oportunidad que  se nos brinda para que nos pongamos del lado de la vida nueva que nos ofrece Jesús y desde  la gracia de su Espíritu Santo, con nuestros ánimos renovados, salgamos al encuentro de todos esos hermanos que sienten amenazadas sus vidas por el poder demoniaco del pecado que llevan a la muerte. 

Señor, Llévanos al desierto y susúrranos en el silencio, con tu palabra. Condúcenos por la ciudad y grítanos entre el tráfico y el barullo que tu, eres nuestro Salvador.

 
posted by Laureano García Muentes at 4:49 a.m. | Permalink |


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