martes, enero 31, 2023

"Te alabarán Señor, los que te buscan"...Salmo 22.

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Martes 31 de Enero del 2023

Jesús es el Señor y delante de Él la muerte física es como un sueño: no hay motivo para desesperarse. Otra es la muerte de la que tener miedo: la del corazón endurecido por el mal. ¡De esa sí que tenemos que tener miedo. Esa es la muerte del corazón que se endurece y lo momifica el pecado. Pero para Jesús nunca es la última palabra, porque Él nos ha traído la infinita misericordia del Padre e incluso si hemos caído, su voz tierna y fuerte nos alcanza: Y nos dice: «Yo te digo ¡Levántate!». 

El Evangelio de hoy tomado de Mc 5, 21-43, nos Dice que: "Cuando Jesús regresó en la barca a la otra orilla, una gran multitud se reunió a su alrededor, Él se quedó junto al mar. Allí llegó un jefe de la Sinagoga llamado Jairo y le suplicó con insistencia, diciendo: "Mi hijita está agonizando. Ven e impón las manos sobre ella para que sane y conserve la vida". Se fue con él. Lo seguía un gran gentío que lo apretaba por todos lados.  Entonces, una mujer que padecía flujo de sangre desde hacía doce años, y que había sufrido mucho y había gastado todos sus bienes sin provecho alguno, antes bien, yendo a peor, habiendo oído lo que se decía de Jesús, se acercó por detrás entre la gente y tocó su manto. Pues decía: "Si logro tocar aunque sólo sea sus vestidos, me salvaré". Inmediatamente se le secó la fuente de sangre y sintió en su cuerpo que quedaba sana del mal.  Mc 5, 21-29.

Llegan a la casa del jefe de la sinagoga y observa el alboroto, unos que lloraban y otros que daban grandes alaridos. Entra y les dice: "¿Por qué alborotáis y lloráis? La niña no ha muerto; está dormida". Y se burlaban de él. Pero él después de echar fuera a todos, toma consigo al padre de la niña, a la madre y a los suyos, y entra donde estaba la niña. Y tomando la mano de la niña, le dice: "Talitá kum", que quiere decir: "Muchacha, a ti te digo, levántate". La muchacha se levantó al instante y se puso a andar, pues tenía doce años. Quedaron fuera de sí, llenos de estupor". Mc 5, 38-42.

Hermanos este relato de hoy nos muestra el gran poder de Jesús que se manifiesta incluso ante la muerte. En los dos casos, podemos apreciar que ante las necesidades que apremian en la vida es importante acudir a Jesús, acercarse a Él y con sencillez y confianza absoluta rogarle con perseverancia e insistencia que no nos abandone y nos refuerce la Fe. 

Jesús vino a habitar entre nosotros para sanar los sufrimientos y curarnos el cuerpo y el espíritu para brindarnos la salvación.

Experimentemos el encuentro íntimo con el Salvador sin miedo y coloquemos en Él nuestras necesidades íntimas y con nuestros ojos veremos sus grandes prodigios. 

Señor, ¡Qué infinito es tu poder y tu misericordia!, tú que te apiadas de todos. Te pedimos que nos permitas acercarnos a ti como lo hizo Jairo el Jefe de la Sinagoga y la mujer con el flujo de sangre; y así, contemplar tu Sagrado Corazón. Queremos seguirte y  enamorarnos más de Ti para ser un propagador de tu amor entre todos los hombres.
 
posted by Laureano García Muentes at 4:49 a.m. | Permalink |


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