viernes, enero 01, 2021

 

REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY

Viernes 1 de Enero del 2021

DIOS ESTA CON NOSOTROS, PONGAMOS EN PRACTICA LO QUE EL, NOS HA ANUNCIADO

Iniciamos con este día de hoy, un nuevo año en el cual, hemos puesto nuestras esperanzas.

Hemos dejado ya atrás un año muy difícil, muy duro y que a muchos sufrimos la pérdida de familiares y amigos, por culpa de la pandemia del covid19. 

Vamos a comenzar un nuevo recorrido y con el, encarar un futuro insospechado, pero que con la Fe y la Confianza absoluta en Dios, lo vamos a vivir cada día, firmes y recargados de la Luz que nos regala Jesús, empeñados en dar cada paso seguros en que lo vamos a lograr.

No vamos a caminar solos, porque, Dios está con nosotros

Hoy el Evangelio está tomado de Lc 2, 16-21 y en él, contemplando ese encuentro de los pastores con Jesús en el portal de Belén y con este encuentro, se convierten en testigos de la Buena Nueva  porque confirman lo que el Ángel les dijo: "No teman, porque les estoy dando a conocer la buena nueva de gran gozo para todo el pueblo: Hoy en la ciudad de David os ha nacido un Salvador. Y esto os servirá de señal: Hallaréis al niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre"

Ellos acudieron a prisa al lugar del nacimiento; y al confirmar lo dicho por el Ángel, regresaron a sus comarcas glorificando y alabando a Dios por lo que habían oído y visto.

Los pastores caminaron hacia Belén. Estaban necesitados de ver al Salvador. Pusieron en práctica lo que Dios les anunciaba.

Interesante apunte, ¿no es así?

Muchos de nosotros estamos necesitados de conocer a Jesús, pero, para llegar a Él, hay necesidad de  dejar esos rebaños que nos encierran como lo son, el egoísmos, los placeres y las vanidades. 

Hay que ser sencillos y humildes porque para entrar al pesebre donde se encuentra Jesús, es necesario doblegar o torcer todas las resistencias que nos impiden arrodillarnos para demostrar nuestra pobreza de corazón y ser sencillos ante la voluntad de Dios.

Estamos invitados hoy pues, a desprendernos de nosotros mismos, a ser humildes y a encontrar en la oración la fuerza que nos acerca al Salvador.

VIVAMOS A PLENITUD EL LLAMADO QUE NOS HACE JESUS Y VAYAMOS A TODOS LOS LUGARES LLENOS DE LA ALEGRIA DE SER SUS TESTIGOS.

 
posted by Laureano García Muentes at 5:48 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>