miércoles, octubre 02, 2019

REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
               
        Martes 2 de Octubre del 2019        


"TE SEGUIRÉ A DONDE TU VAYAS"

Gloria al Señor, nuestro Padre Dios por toda la eternidad. ¿Qué más podemos nosotros los hombres pedir a Dios? Nos regala la vida cada día y nos llena de valor para seguir el camino con alegría y enfrentando todas las circunstancias  que se nos presentan. ¡¡¡Él es todo 
Amor.!!!

"¡¡¡Señor, mi Maestro, te seguiré a donde vayas!!!" Lc 9.57.

Hoy en el Evangelio tomado de Lc 9. 57-62 se percibe el interés que muchos de nosotros queremos y deseamos para seguir a Jesús.

Muchos somos los que le expresamos, como aquellos candidatos a ser sus discípulos: "Te seguiré Señor, mi Jesús, a donde tú vayas"

Que fácil es expresar esas palabras y hasta jurar para cumplirla. Pero, en el fondo de sus corazones no existe 
la voluntad y la decisión firme de dejar a un lado y atrás, esas seguridades, esos gustos, esos placeres mundanos, que le atan y no les permiten avanzar. 

Hoy Jesús nos quiere como sus discípulos pero con una condición única: Dejarlo todo. Él quiere que nos Despojemos de todo eso que nos mantiene paralizados

Nos hemos venido acostumbrando en la vida a seguir ejemplos de muchas tradiciones pasadas; y muchos se encierran en ellas tomándolas como sus banderas, y hasta dicen: "Entre mis antepasados existían hombres valientes porque vivieron con fuerza los placeres de las mujeres, el dinero, la promiscuidad, los vicios...y ellos, salieron adelante"; y... hasta se atreven a señalar a los demás como parcos y pendejos porque no aprovechan la vida.

Jesús, nos llama a romper hasta los lazos familiares y esas estructuras donde se han querido cimentar la constitución de las familias para que con sus valores y enseñanzas nos dispongamos a seguirle dando muerte total a todo lo que poseemos en el fondo del corazón y que nos mantiene atados.

Él nos pide hoy que tomemos esas grandes y únicas decisiones que implican tomar el camino del Éxodo para abrir los ojos, levantarnos y emprender el camino a la casa del Padre, arrepentidos y dispuestos a decirle: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, ya no merezco ser llamado hijo tuyo" Lc 15.21 (Parábola del Hijo Prodigo).

En el Evangelio de hoy, nos dice: "Otro le dijo: Te seguiré, Señor, "pero" primero déjame despedirme de mi familia. El otro le dijo: Señor, déjame primero enterrar a mi padre 
Jesús les respondió a los tres: " El que ha puesto la mano en el arado y mira atrás no es apto para el Reino de Dios. " Lc 59-62

Preguntémonos: ¿ Vivo de corazón el discipulado al que me ha llamado Jesús?, ¿ Me siento libre y con toda la disposición de ir al lado del Salvador del mundo?

Pidámosle al Espíritu Santo que nos llene de fuerza y valor para sacar esas cosas que están en nuestros corazones y que nos haga libres y livianos para comenzar de nuevo y emprender ese Éxodo que me pide el Señor. 
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Te invito a que multipliques la invitación a leer estos mensajes de Reflexión de la Palabra diaria entre tus familiares y amistades. Todo para la Gloria de Dios Padre.

 
posted by Laureano García Muentes at 6:45 a.m. | Permalink |


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