miércoles, abril 22, 2009
VIVAMOS CADA DÍA LAS GRACIAS QUE NOS REGALA DIOS

Que maravilloso es vivir cada día las gracias que nos regala Dios a través de su Espíritu Santo; y la idea no es que las vivamos con informaciones teóricas que se encuentran en los libros o por simples comentarios de amigos o personas cercanas a nuestro diario vivir; sino que de verdad, sintamos en nuestros corazones que somos hijos de Dios y como tal, le amamos, le complacemos y seguimos, haciendo de cada momento de vida, una práctica de su amor.

Una de las experiencias más cercanas que tenemos a la mano es la vivencia de la oración, con ella, podemos percibir de manera franca y sincera nuestras pretensiones y deseos de renacer a la vida; y ese clamor de requerirle a Dios por su ayuda, para que así, nos lleve de su mano por los caminos que nos hagan crecer y alcanzar con nuestros esfuerzos la perfección que quiere darnos.

Un amigo fiel que tenemos muy cerca es el Espíritu Santo, con su intersección, pedimos que sea Él quien hable por nosotros y trate de ayudarnos a vivir la experiencia del amor de Dios, ha serle fiel a sus enseñanzas en medio de nuestras alegrías, dificultades y problemas. Su presencia en nosotros nos anima, nos llena de fuerzas y nos infunde con su aliento para seguir con paso firme, con seguridad y confianza la vida en su gracia. Sabemos que Él suplementa y perfecciona nuestras oraciones.

Y como necesitamos de su ayuda hoy. Muchas son las veces que no sabemos pedir lo que necesitamos, ni mucho menos sabemos como debemos acercarnos a Él y pedirle. Son muchas nuestras peticiones que son mal fundamentadas o animadas por apetencias demasiado carnales o simplemente creemos que necesitamos lo que realmente no necesitamos. Pedimos que nos de poder, dinero y otras apetencias que deterioran nuestro ser y nos apartan de la presencia de Dios.

El Espíritu Santo vine en nuestra ayuda cuando le hablamos de manera sincera e intima y con una fe perseverante. Cada palabra que pronunciemos, cada sentimiento que tengamos ha de expresar realmente lo que nuestro corazón necesita y ese deseo franco que nos ayude a acercarnos más a Dios.

VEN ESPÍRITU SANTO LLENA HOY NUESTROS CORAZONES, AYUDANOS A PEDIR LO QUE NOS CONVIENE Y QUE CADA UNA DE NUESTRAS PETICIONES SEAN CONVENIENTES PARA NUESTRAS VIDAS.
 
posted by Laureano García Muentes at 7:05 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>