miércoles, enero 22, 2020
REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
Miércoles 22 de Enero del 2020


"JESÚS NOS INVITA A SER COHERENTES Y A DARLE MAS IMPORTANCIA A LAS PERSONAS QUE A LAS ESTRUCTURAS Y TRADICIONES. "

Señor, tu tienes tus manos siempre extendidas para acogernos y brindarnos tu amor. Gracias por ser tan generoso. A ti no te importan nuestros errores y fracasos, solo deseas, que tengamos fe y confianza en ti y todas esas cargas se harán livianas. 

Hoy en el Evangelio tomado de Mc 3, 1-6 nos presenta a Jesús sanando a un hombre que tenía la mano paralizada. Él, conociendo las intenciones de los Fariseos, Escribas y hombres de la ley que le acompañaban, les pregunta: "¿Que está permitido en sábado según sus leyes? ¿ hacer lo bueno o lo malo? ¿Salvarle o dejarle morir?". Mc 3, 1-4.

Este cuestionamiento que les hace a quienes le seguían y que estaban al acecho de ver que hacía Jesús ese día sábado, consagrado según las leyes judías como sagrado; para acusarlo y señalarlo de blasfemo; tienen una gran enseñanza y muy profunda, porque pone en tela de juicio nuestras actitudes incoherentes

Jesús mira y muy rápido analiza nuestros pensamientos pecaminosos y que incitan a juzgar y señalar. 

Pero, en el caso de esos "doctos", sus actitudes fueron el silencio y como dice el dicho: el que calla otorga; un silencio que va acompañado de obstinación, manipulación y de ocultas intenciones que sienten y desean en sus corazones.

Aquí vemos que Jesús, desafía la mentalidad y las costumbres, las tradiciones y preceptos inventados que están "amparados por las leyes" y declara que para Dios, lo más importante es la vida, la salud y la dignidad de la persona

Él conmovido y dolido por esas incomprensiones, por la dureza de esos corazones impuros cargados de las injusticias de las leyes y decretos que promulgan; llama al enfermo, lo coloca de frente a ellos, y lo sana. 

Si, ellos mostraron un silencio que denotaba molestia, resistencia a lo nuevo que venían promulgando Jesús y a esa palabra sincera que llamaba al cambio. 

Hoy, este Evangelio nos llama a todos al abandono del camino de la terquedad y del capricho buscando siempre el camino de la Justicia, el Amor y la solidaridad fraterna con otras personas y a que demos mayor importancia a las personas que a las 
estructuras,  normas y tradiciones.

Les invito a que multipliquemos la invitación a leer estos mensajes de Reflexión de la Palabra diaria entre tus familiares y amistades. Todo para la Gloria de Dios Padre.

 
posted by Laureano García Muentes at 7:02 a.m. | Permalink |


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