"Dichoso quien teme al Señor"...Salmo 112

Sábado 5 de Noviembre del 2022

Acumular riquezas. Tratar de buscar tablas de salvación en nuestros egoísmos, poner siempre por bandera en nuestra vida los intereses particulares, no entregarnos del todo ni confiar en todo momento porque siempre buscamos aferrarnos a algo material que nos dé una esperanza caduca y marchita. Mal vivir una existencia cargada de excusas, de rencores, envidias, en las que por estar centradas en ellas nunca nos sorprende un rayo de alegría. Así, de esa manera se pierde la vida. O mejor dicho, se ahoga la vida. Aparece una continua polilla que nos va minando por dentro y no nos deja huecos, insensibles. Aparece el ladrón que nos roba la paz, la alegría. Aparece una especie de óxido que le quita todo el brillo a nuestra mirada y la apartamos de la cruz de Cristo. Sin embargo, Dios conoce nuestros corazones y nos llama a vivir fiel, coherentemente, justamente, libremente, compasivamente, como hijos de la luz.

En el Evangelio de hoy tomado de Lc 16, 9-15, Jesús les enseña a sus discípulos sobre el uso indebido de las riquezas materiales porque ellas, ahogan la vida. Y les dice: "Ganaos amigos con el dinero de iniquidad, para que, cuando os falte, os reciban en las moradas eternas. El que es fiel en lo poco, también en lo mucho es fiel; el que es injusto en lo poco, también en lo mucho es injusto. Pues, si no fuisteis fieles en la riqueza injusta, ¿Quién os confiará la verdadera? Si no fuisteis fieles en lo ajeno, ¿lo vuestro, quién os lo dará? Ningún siervo puede servir a dos señores, porque, o bien aborrecerá a uno y amará al otro, o bien se dedicará al primero y no hará caso del segundo. No podéis servir a Dios y al dinero" Lc 16, 9-13

Como lo dice el texto, los Fariseos que eran muy amigos del dinero, oían todo esto y se burlaban de Jesús. 

Y es que Jesús les toca donde más les duele. Si, Él les habla de la acumulación de las riquezas y llevar una vida acomodada y les advierte que esto les conlleva al  egoísmo y al afán permanente de los intereses particulares, pues estas actitudes se centran vivir una esperanza marchita, donde las excusas, los rencores y las envidias van opacando sus vidas y sobre todo la presencia de Dios.

Y miren en este contexto nos resulta muy importante mirar como el Señor nos sigue llamando a tener una vida recta y un seguimiento coherente. Él nos recalca que las cosas materiales que tenemos o acumulamos son pasajeras y por lo tanto, no podemos vivir apegados a ellas.

Hermanos, la advertencia de Jesús es muy clara cuando dice: " El que es fiel en lo poco, lo es también en lo mucho; y el que injusto en lo poco, también lo es en lo mucho." Lc  16, 11. Y ello nos lleva a afirmar que la única manera de hacer que fructifiquen para la vida eterna nuestras cualidades y capacidades personales y también, las riquezas que poseemos es compartiéndolas con nuestros hermanos más necesitados.