sábado, febrero 15, 2020
REFLEXIÓN DEL EVANGELIO DE HOY
Sábado 15 de Febrero del 2020


"JESÚS NOS INVITA A SER MISERICORDIOSOS CON LOS QUE PADECEN NECESIDADES, LOS QUE SUFREN Y LLORAN"

Señor, en todo nuestro alrededor se nota tu presencia; cada despertar es sentir que tú nos lo das todo para vivir y seguir. ¿Como dudar de tu existencia? ¿Como no amarte, si eres dador de la vida? Gracias Padre, por ser tan bueno con nosotros. 

El Evangelio de hoy que está tomado de Mc 8, 1-10 nos recuerda la grandeza de la Misericordia de Dios. Un Jesús Hijo de  Dios, sensible, que siente compasión por la humanidad y que se preocupa por cada hombre o mujer para que con Él en el corazón, calme las angustias, los sufrimientos y desilusiones que le provocan la vida diaria que  el da el mundo. 

Hoy Jesús con estas, sus Palabras, nos provoca y nos hacen ver como estamos nosotros respondiendo al ser Misericordia y parece ponernos a prueba nuestra Fe.

¿Donde guardamos  el pan que nos ha venido regalando a lo largo de nuestra vida (Los dones y talentos)?.
Él, hoy nos pide sacar el pan que guardamos y lo multipliquemos entre la gente que hoy vive el hambre y la sed del amor.

Si, allí, entre la multitud que espera con ansias que le miremos y lo apoyemos para poder alcanzar una calidad de vida donde sus familias crezcan y se multipliquen de acuerdo a la esperanza que señala Dios. 

Ellos, esperan nuestro acompañamiento sincero y certero para saciar sus necesidades materiales y espirituales. 

Miremos algo interesante: Moisés vivió en el desierto junto al pueblo que él estaba liberando de la esclavitud, una experiencia similar a la que hoy en el Evangelio está viviendo Jesús.

Moisés elevó a Dios las súplicas para saciar las lágrimas y la desesperanza de su pueblo que podía morir del hambre. 
Hoy Jesús, ve a su alrededor una multitud que le seguía desde hace varios días, algunos aún sin saciar sus sentimientos y necesidades.

Dios, tanto en Moisés como en Jesús, manifiesta su Misericordia y Compasión y dan el Mana o el alimento de la Esperanza y de la Confianza y nos muestra el sentido de lo que significa el compartir.

Hoy nos pide la Palabra, La Solidaridad fraterna que se ha de conjugar en la sensibilidad para sentir la Compasión por los que esperan de nosotros, una mano y un apoyo incondicional.

Preguntémonos: ¿Estamos prestos a enfrentar los desafíos que nos pide Jesús  para liberar a la humanidad del hambre de amor y de la esperanza?

Tú y yo, tenemos la Fe y la confianza en que Jesús nos enseña y acompaña en nuestras jornadas de lograr en el mundo una Evangelización de acuerdo a sus propuestas. 

Les invito a que multipliquemos la invitación a leer estos mensajes de Reflexión de la Palabra diaria entre tus familiares y amistades. Todo para la Gloria de Dios Padre.

 
posted by Laureano García Muentes at 9:10 a.m. | Permalink |


0 Comments:


<body>