Retomo desde hoy mi compromiso evangelizador y Pido excusas por no haber compartido el mensaje del Evangelio por mas de un mes, por encontrarme hospitalizado por una caída en el baño de mi residencia que me produjo un hematoma en el cráneo y fui objeto de un procedimiento quirúrgico que me mantuvo aislado del computador.
"Yo soy el Señor, Dios tuyo, escucha mi voz"...Salmo 80
REFLEXION AL EVANGELIO DE HOY
Viernes 28 de Marzo del 2025
En el Evangelio de hoy tomado de Mc 12, 28-34, se nos narra la conversación que tuvo Jesús con un Escriba, doctor de la ley quien quería saber cuál sería el primero de todos los mandamientos pues consideraba como lo interpretaban lo judíos, que todos tenían el mismo valor y la misma importancia ya que venían de Dios. A lo que Jesús le respondió: "El primero es: “Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor; y tú amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y todas tus fuerzas”. El segundo es: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. No hay otro mandamiento más grande que éstos”. Mc 12, 28-30.Los Escribas pertenecían a un grupo religioso muy importante de Judea y se encargaban del estudio de las Sagradas Escrituras y sobre su aplicación en la vida de los integrantes del pueblo. Por lo tanto, conocían perfectamente lo que decían sobre los mandamientos.
Jesús le hace ver que el primero de los mandamientos era el más importante y que por añadidura también el amor al prójimo tenía la misma intención.
El quiso reiterarle que el amar a Dios-Padre con todo el corazón, con toda el alma, espíritu y fuerzas es el deber de todos y cada uno de sus hijos; y por tanto, el amor al prójimo tiene el mismo valor y deber. Para ello, no debe haber restricción alguna pues lo más importante es ser capaces de entender, querer y sentir ese sentimiento de amor incondicional.
Hermanos, esta lección de Jesús en este día nos lleva a ser contrarios a cualquier sentimiento de hostilidad, antipatía, rechazo y odio hacia los demás pues el hombre es imagen de Dios y el amor que siente Él es sin barreras.
Nada hay más conforme con la naturaleza que el comunicarse con los demás y ser amables de manera desinteresada, pues, donde hay amor estará también Dios.