viernes, noviembre 26, 2010
SIGUE ADELANTE PIENSA EN DIOS Y EN SU PALABRA

Todos los días estamos enfrentados a muchas dificultades, pero no nos preocupemos por ello, eso normal en nuestras vidas; ella supone vivirla así, en medio de regocijos, éxitos, desaciertos y dificultades. Momentos de risas y satisfacciones y otros, de tristezas y dolores. Todo ello, forma parte de nuestro ser.

Miren, algunas de esas dificultades nos parecen más fuertes que otras y hasta nos afectan grandemente cuando la vivimos, ellas nos amenazan con dejarnos derrotados, acobardados y hasta sin sentido por siempre.
Somos muchos los que nos acobardamos y preferimos actuar de manera cobarde o nos resguardándonos en posiciones fanáticas recurriendo a ritos y simbologías de brujerías o talismanes; y siguiendo el camino de muchos que las han vivido, creemos que por allí, se encuentran muchas soluciones a nuestros problemas.

No distraigamos nuestras mentes y nuestros corazones, Dios es el único camino que nos lleva por el bien y la verdad, Él es la fuerza para vencer todas las dificultades.
No nos acobardemos, ni nos sintamos mal por tener miedo o pavor frente a ellas. El camino que hemos de seguir es buscar a Dios, pensar en El y tomar de guía permanente su Palabra, en ella está la vida y la esperanza.

Coloquemos en sus manos nuestros designios, nuestros corazones, dejemos que El actué, nos ayude a encontrar las fuerzas y las salidas para vencer y salir más que triunfadores en todas nuestras situaciones de tristezas y dificultades.
Miren, las derrotas fueron hechas para el que cree en el Señor, esas son nuestras cruces diarias las cuales hemos de cargar y soportar como lo pide Jesús en su Palabra.

Hoy es un día para estar recargados de la presencia de Dios, un día, donde la victoria ha de estar presente en nuestras vidas con toda pasión, abriéndole el corazón al Señor pidiéndole con toda humildad, que nada ni nadie nos aparte más de su presencia. Que nos alimente con sus gracias y nos ayude a vivir la vida como El la desea de nosotros.

De verdad, no nos detengamos un solo instante, sigamos adelante pensando en Dios y tengamos la certeza y la seguridad que en su Palabra están las guías necesarias para ir junto a Él, recorriendo el verdadero camino hacia toda victoria.

Apartemos esas malas amistades y esas palabras o de esos comentarios que parecen predecirnos el bien para nosotros, ellos muchas veces llevan por dentro el veneno de la perdición. Entreguémonos a Dios y coloquemos en sus manos nuestras vidas. Te aseguro que en Él está la victoria.

SEÑOR, TE AMAMOS Y CONFIAMOS EN TI, LLENANOS DE FUERZA Y SALUD PARA QUE JUNTO A TI PODAMOS ALLANAR TODOS LOS CAMINOS.
 
posted by Laureano García Muentes at 4:57 a.m. | Permalink | 0 comments
miércoles, noviembre 17, 2010
EL REINO DE DIOS EN LA TIERRA ES DE CARÁCTER ESPIRITUAL

Las dos cortas ilustraciones presentadas por Jesús nos dicen que el reino de los cielos es como un “tesoro escondido” en un campo y “una perla preciosa hallada”.

El punto de la historia está en que el reino de los cielos ha sido comparado con objetos que tienen gran valor entre los hombres. Tanto el tesoro como la perla son objetos de grandísimo valor y de acuerdo a Cristo, cualquiera que haya “el tesoro” o “la perla” del reino de los cielos sin duda alguna actuará de igual manera a como procedieron aquellos dos personajes de su historia.

Ambos personajes “vendieron todo lo que tenían” con el fin de comprar el campo donde estaba el tesoro y obtener la perla de gran valor. Tanto el tesoro como la perla representan a Cristo mismo. Es Cristo y Su mensaje (el evangelio) aquello de gran valor lo cual todos aquellos quienes le encuentran.

Tal como no todo el mundo tiene la dicha de encontrarse con un tesoro o una perla preciosa, de igual manera, así también es con los asuntos del reino. Es muy posible que algunos teniendo el tesoro frente a sus ojos no puedan apreciar su valor y otros teniendo la perla preciosa en sus manos no puedan apreciar su belleza. Son muchos los que estando cara a cara con Cristo le rechazaron y muchos hoy continúan haciendo lo mismo.

La Biblia dice hablando de Cristo que “a lo suyo vino y los suyos no le recibieron” y también que “la luz (Cristo) vino a este mundo pero los hombres amaron más las tinieblas que la luz” (Juan 1). Como es posible despreciar y rechazar tan fácilmente algo de tan gran valor como Jesucristo.

Como es posible rechazar al autor de la vida y escoger las tinieblas antes que la luz. Solamente porque el hombre en su estado natural tiende siempre hacia el pecado y la oscuridad. El hombre nos dice la Biblia está ciego y sordo a las realidades del evangelio y de Dios. Por eso el hombre rechaza el tesoro escondido y la perla preciosa.

El reino de los cielos en la tierra es un reinado de carácter espiritual el cual no todos son capaces de ver y comprender.

SEÑOR, AYUDANOS A ENTENDERTE Y COMPRENDERTE, TU REINO ES EL AMOR ENTRE NOSOTROS.
 
posted by Laureano García Muentes at 4:45 a.m. | Permalink | 0 comments
miércoles, noviembre 10, 2010
LOS AFANES DE UNA PASIÓN

La historia está llena de muchos testimonios de hombres y mujeres que apasionados por una causa, han ofrendado hasta su vida por hacer realidad sus sueños.

Muchos fueron sus esfuerzos y empeños. Sus luchas persistentes y su confianza en Dios le han ayudado y los han convertido en líderes fundantes de propuestas que ayudan a la humanidad a construir sueños y esperanzas.

Ellos hicieron de su vida una pasión, un sueño por una causa, una meta propuesta, que no les permitía adormecimientos, letargos, o esperas, sino un sentimiento, una fuerza interior que les hacía vibrar, luchar, sufrir, buscar incansablemente nuevas formas para lograr objetivos propuestos y así transformar su medio, alcanzar la justicia y la paz, desde el amor por el otro y desde la fe, cualquiera fuera su religión u oficio.

Gandhi que era un hombre profundamente religioso, decía: “La fe no existe para ser predicada, sino para ser vivida”. Es entonces cuando se propaga por sí misma.”

La pasión supone apertura al conocimiento y a la reflexión, disponibilidad incondicional y un profundo sentido de solidaridad y altruismo, esto humanamente hablando, y qué no diremos desde el sentido Cristiano – Evangélico.

La Palabra confronta nuestra vida, “El espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para anunciar la Buena Nueva a los pobres, me ha enviado para proclamar la libertad a los presos, dar vista a los ciegos, para poner en libertad a los oprimidos, para proclamar el año de gracia a favor del Señor”( Lc. 4,18-19).

Me atrevería a decir que este texto resume lo que ha de ser la experiencia de la pasión por Jesucristo, es sentirnos enviados a una misión clara y contundente. Es desde aquí, desde Jesús, de donde parte el legado de nuestro Padre Fundador y que hace posible la misión que se nos ha confiado, sin ir muy lejos; en nuestros propios ambientes, empezando por nuestra propia familia, por nosotros mismos, en nuestras relaciones con el otro, en el trabajo, en la política. El Salvatoriano está llamado a permear de un ambiente cristiano los espacios que toca y ocupa.

Qué fácilmente nos alejan de una verdadera libertad, el poder, las falsas democracias, las manifestaciones culturales, el consumismo, los medios de comunicación y otros, ¿qué capacidad crítica tiene el Salvatoriano de hoy para actuar y transformar estos ambientes, que a cambio de llevarnos a una verdadera libertad, oscurecen la mente, esclavizan e impiden ver más allá de lo que es justo y verdadero y obstaculizan cada vez la posibilidad del conocimiento y la verdad?

Sé hermanos y hermanas, que vivir estos dinamismos de la pasión, a mi modo de ver, no es fácil, supone una actitud de docilidad al Espíritu, una capacidad para descubrir, leer e interpretar los signos de los tiempos, como nos lo pide el P. Francisco María de la Cruz Jordán y generar un compromiso de transformación en nosotros mismos y con el entorno en el que Dios nos ha plantado.

Necesitamos pues desaprender para aprender nuevos métodos, que hagan de nosotros y nosotras personas más humanas y comprometidas con la vida y una vida en abundancia, que alcance también a los beneficiarios de nuestra acción apostólica, la cual nos enriquece y apasiona y da razones de esperanza de un mundo mejor, de un cielo y una tierra nueva.

SEÑOR, PERMITE QUE CADA DIA TODOS LOS HOMBRES NOS APASIONEMOS MAS POR BUSCARTE, HALLARTE Y ESCUCHARTE, SIENDO TESTIGOS DE TU PRESENCIA.
 
posted by Laureano García Muentes at 12:47 p.m. | Permalink | 0 comments
jueves, noviembre 04, 2010
EN JESÚS ESTÁ LA FUENTE DE LA VIDA

Jesús es la fuente y de Él brota la vida divina en el hombre. Él nos la provee y nos prepara para que la alcancemos, sólo nos hace falta que con decisión y profunda fe nos acercarnos a Él, le miremos a sus ojos, le aceptemos y permanezcamos a su lado.

Esa vida que nos regala no es más que el inicio que le damos a nuestra santidad, la santidad que Dios quiere para todos los hombres por igual, la alcancemos con la ayuda de su gracia.

Sí, muchos somos en el mundo los que anhelamos beber de esa fuente, fuente que es nada más y nada menos el Corazón de Cristo, la fuente de la vida eterna y de nuestra santidad.

Miren, nuestra perfección moral nace primordialmente del amor, de allí nace la semejanza con Dios-Padre. Así lo afirma San Juan en el Cap. 14,21:«El que acoge mis mandamientos y los cumple, dice Cristo, ése es el que me ama; y el que me ame, será amado por mi Padre; y yo lo amaré y me manifestaré a él».

No dudemos pues, que Jesús que es fuente de la vida, pues por medio de Él se ha logrado la victoria sobre la muerte. También es fuente de santidad, pues en Él ha quedado derrotado el pecado que es el enemigo de la santidad y como tal, es el enemigo del progreso espiritual del hombre.
Del Corazón del Señor Jesús deriva la santidad de cada uno de nosotros. Aprendamos pues de Él quien representa el amor a Dios y la comprensión que se encierra en el misterio del pecado.

Qué bueno sería que hoy hagamos actos de reparación por los errores cometidos por nosotros y por nuestro prójimo a lo largo de nuestras vidas, que esculquemos el corazón en lo más profundo de sus entrañas y lo reparemos por el rechazo de la bondad y del amor de Dios.

Sería una gran dicha, que a partir de hoy muchos hombres y mujeres en el mundo nos acerquémonos diariamente a la fuente de la vida, esa fuente de la cual brotan manantiales de agua viva; y de manera humilde y sincera, le pidamos como la samaritana: «Señor dame de beber de esa agua, esa agua que tú tienes y que nos da la vida eterna».

Atrevámonos, levantémonos y emprendamos el camino hacia El. Solo El es el Camino, la Verdad y la Vida.

SEÑOR, DADOR DE VIDA, FUENTE DE LA ETERNA FELICIDAD, DANOS A CADA INSTANTE TUS GRACIAS PARA ALIMENTAR NUESTRA FE Y NUESTRA ESPERANZA.
 
posted by Laureano García Muentes at 10:24 a.m. | Permalink | 0 comments
<body>